El nuevo logotipo que acompaña este cambio, propone una nueva interpretación del puente que ha sido símbolo del Grupo durante más de 40 años y se complementa con un horizonte en movimiento que ilustra el territorio de la marca Saint-Gobain centrado en los lugares donde la gente vive y se mueve.
Sus colores cálidos y vibrantes crean una conexión más emocional con el público. La imagen renovada refleja el nuevo posicionamiento de la marca y su promesa de: diseñar, fabricar y distribuir materiales ideados para el bienestar de las personas y su futuro.
Para Pierre-André de Chalendar, Presidente y CEO de Saint-Gobain, “nuestros materiales y soluciones contribuyen a mejorar el confort de las personas en su día a día, donde quiera que vivan, trabajen y viajen, y a la vez ayudan a preservar el planeta para las generaciones futuras. Para nosotros, el bienestar y la sostenibilidad son complementarias: son los dos lados de la misma moneda.”.
Con esta nueva marca, Saint-Gobain desea reforzar su presencia en la vida diaria de las personas y destacar sus diferenciales: experiencia en materiales, cultura de innovación, comprensión de las necesidades del cliente, así como su apertura y responsabilidad.
“Debemos ser más visibles para el consumidor final”, afirma Pierre-André de Chalendar. “Hoy en día, las marcas fuertes son las que demuestran el valor que brindan a las personas. Deseo que todos sepan qué es Saint-Gobain y cuál es nuestra contribución en la vida diaria de la gente”.
Con esta nueva propuesta intenta brindar soluciones a sus clientes y, sobre todo, al consumidor final, cuyo poder de decisión y de recomendación se incrementa a cada día, incentivado por las tecnologías digitales.