La empresa de monopatines eléctricos Lime anunció de forma sorpresiva que se retira de la Argentina, con apenas tres meses de operación en el país. La fecha de salida todavía no fue comunicada.
El unicornio, de origen estadounidense, oficializó su llegada a Buenos Aires –único distrito en el que está disponible el servicio– en octubre del año pasado y se convirtió en uno de los principales jugadores del segmento del mercado local, junto con las otras cinco compañías que desembarcaron (Grin, Movo, GlovoGo y Bird).
La decisión se encuadra en una reorientación de la estrategia comercial, en pos de aumentar la rentabilidad. Asimismo, la firma despedirá al 14% de su personal (aproximadamente 100 trabajadores). "Los cierres tienen un efecto no sólo en los pasajeros, sino en nuestros empleados temporales y de tiempo completo", expresó la compañía en un comunicado que publicó en su sitio web.
"Parte de hacer realidad la transformación de la movilidad urbana es lograr la independencia financiera. Por eso, cambiamos nuestro enfoque. Si bien la mayoría de los 120 mercados en donde tenemos presencia adoptaron soluciones de micromovibilidad rápidamente con éxito, hay otros donde este tipo de transporte evolucionó más lentamente", explicaron desde la empresa.
Por esta razón, Lime se retirará de Buenos Aires y otras seis ciudades de América latina: Montevideo, Río de Janeiro, São Paulo, Lima, Bogotá y Puerto Vallarta. Santiago de Chile será la única ciudad que quedará activa en la región.
También, dejará de funcionar en las ciudades estadounidenses de Atlanta, Phoenix, San Diego y San Antonio, y en la localidad austríaca Linz. En total, son 12 los sitios de los que se irá.
"Durante casi tres años, Lime creó nuevas opciones de transporte en todo el mundo. En más de 120 ciudades, tuvimos la suerte de construir una comunidad de clientes leales y asociaciones profundas con los responsables políticos y las organizaciones locales, a través de viajes al trabajo y por placer", destacó la compañía en el texto que difundió.
Buenos Aires era considerada una plaza estratégica para la empresa, donde tenía pensado radicarse de forma definitiva tras el arribo. "Está bien preparada para este sistema y hay una alta demanda", aseguró a El Cronista Iván French, gerente general de Lime para la Argentina y Uruguay, meses atrás cuando se produjo el desembarco.
Lime tenía la intención de expandirse a otras provincias, pero la decisión de la compañía a nivel global cerró las puertas a este plan. Desde la empresa, cuentan que, en sus tres meses de operación, sus usuarios en la Argentina recorrieron en total 77.678 kilómetros con los 600 dispositivos que tienen en los barrios de Recoleta, Retiro, Microcentro, Puerto Madero, Belgrano y Villa Crespo.
Fundada hace más de dos años, la compañía está valuada en u$s 2400 millones y cuenta con el apoyo inversor de Uber y Google. Una de sus principales diferencias con la competencia es que la un servicio de colaboradores que podrán ganar dinero haciéndose responsables de la carga y distribución de scooters.