5DÍAS
La ola argentina parece profundizarse con el paso de los días. Hace algunos días reportábamos que de cada diez departamentos vendidos en Asunción, siete fueron comprados por ciudadanos argentinos. Se dice que la dificultad para obtener dólares en el país vecino está obligando a inversionistas a buscar refugio en Uruguay o en el Paraguay.
En el ámbito rural, aunque la afluencia de argentinos ha mermado algo, la revista Chacra consideraba nuestro país un destino apetecible para radicar inversiones agropecuarias dado que el Paraguay “es políticamente estable, cuenta con una moneda con 80 años de antigüedad sin devaluación, está en franco crecimiento, ofrece potencial en todos los rubros y siempre ha sido amigable para la inversión extranjera”.
La radicación de capitales también está experimentando el mismo fenómeno. De 30 empresas que están mostrando interés en establecerse en el país, 11 son argentinas. Esto se parece mucho a una huida tumultuosa de capitales argentinos por diversas razones. Uruguay, otro destino elegido por empresarios trashumantes, se sacó la lotería al recibir a MercadoLibre.com, dedicada a compras, ventas y pagos por Internet.
Aunque nosotros mismos no nos percibamos así, muchos inversionistas extranjeros nos consideran un destino serio para radicar capitales. Baja presión impositiva, costo de vida razonable, inflación controlada y moneda estable, son variables importantes a la hora de planificar un negocio. La confirmación de todo está en los niveles crecientes de inversión extranjera directa (IED). Datos duros y confiables.