Si contás con un ambiente dentro de tu casa que recibe luz solar y esté ventilado, podés tener tu propio green para jugar al golf.
Existen dos opciones: el césped natural y el artificial. Ambos igual de válidos para el fin que todo golfista pretende darle en un espacio reducido.
“El césped natural -que recomiendo sea Tifway- necesita muchos cuidados, sobre todo sol y viento asegurado”, explica el experto en paisajismo Darío Sombra de Raíz Urbana.
En caso de instalarlo, es necesario primero aplicar capas de distintos materiales: primero se debe poner una alfombra de grava mediana, cubierta por otra gruesa, una capa de leca, otra de grava más fina, arena y algún tipo de sustrato que contenga compost y resaca de río. Cuando se completan todos los niveles, recién se puede agregar el césped; serían unos 15 centímetros de espesor.
El césped natural requiere muchos cuidados -sobre todo si no cuenta con una salida importante de aire y una entrada de sol- por lo que es factible que muera en poco tiempo si se descuida.
En cambio, el césped sintético tiene una vida útil más prolongada y cuentan con texturas y colores similares a los naturales. La única diferencia es que no precisa mantenimiento. Para la instalación sólo es necesario agregar una capa de arena debajo para evitar el roce directo entre la alfombra y el piso.
El resto es un “juego”.
Una cancha de minigolf en tu casa
(Por Ivanna Torres Riesco - @ivannatr) El sueño de tener tu propia cancha de minigolf dentro de la casa es posible. Un paisajista nos explica cómo instalar césped natural y artificial para dejar tu green listo para jugar.