Las tensiones comerciales entre México y EE.UU., agravadas por la demora en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), podrían terminar beneficiando a la Argentina.
Ocurre que los grandes fabricantes de pan, pasta y tortilla de harina del país azteca están buscando proveedores alternativos de trigo -el insumo fundamental- para reducir su dependencia de Estados Unidos -su principal proveedor- a medida que las relaciones comerciales entre los dos vecinos se deterioran.
Por ello planean importar hasta 100.000 toneladas de Argentina, valorada en unos u$s 20.000.000 según los precios actuales, cuando nuestro país coseche trigo a finales de este año, según publica la agencia Reuters.
México planea importar hasta 100.000 toneladas de Argentina ante la caída del abastecimiento de parte de EE.UU., cuyos envíos de trigo a México cayeron un 38% en los primeros cinco meses de 2018.
Tras la concreción de un cargamento de prueba de 30.000 toneladas, en diciembre del año pasado, las autoridades mexicanas estarían listas para requerir más cantidades ante la caída del abastecimiento de parte del país que preside Donald Trump, cuyos envíos de trigo a México cayeron un 38%, a u$s 285.000.000, en los primeros cinco meses de 2018.
"Es importante enviar señales al Sr. Trump", dijo José Luis Fuente, director de Canimolt, un grupo comercial mexicano que representa el 80% de los molineros mexicanos. Y añadió que "México seguirá comprando trigo americano por su proximidad, no podemos seguir teniendo esta dependencia absoluta".
Según Reuters, también el gigante mundial de granos Bunge, que administra una de las operaciones de molienda más grandes de México, reservó la compra argentina de trigo junto con otros siete compradores, a pesar del costo de uno o dos dólares más por tonelada que el trigo estadounidense.
Misión comercial
En línea con ese objetivo, el gobierno mexicano planea profundizar contactos durante la Reunión Ministerial de Agricultura del G20, que se realizará este fin de semana en Buenos Aires.
Así lo señaló el jefe de Comercio Internacional del Ministerio de Agricultura de México, Raúl Urteaga, quien dijo que el país "tendrá sus propias luchas logísticas al destetarse de los suministros estadounidenses" y confirmó "las gestiones para expandir los suministros desde Argentina".
El gobierno mexicano planea profundizar contactos con Argentina durante la Reunión Ministerial de Agricultura del G20, que se realizará este fin de semana en Buenos Aires.
Del lado argentino, el presidente de la Asociación Argentina de Trigo (Argentrigo), David Hughes, recalcó que "el esfuerzo de Argentina por tomar una porción del mercado de trigo de México sigue siendo tentativo y enfrenta desafíos para competir en precio".
En diálogo con la mencionada agencia, Hughes añadió: "Con el trigo del país ahora aprobado para la importación y la próxima cosecha casi plantada, estamos todos listos para vender a México".
Aranceles
Mientras tanto, al norte de la frontera mexicana todo parece indicar que la situación irá escalando ya que el propio Donald Trump señaló esta semana su compromiso a largo plazo con los aranceles, al anunciar que echará mano a un programa creado durante la Gran Depresión para asistir en u$s 12.000 millones a los productores estadounidenses de cerdo, cereal y lácteos afectados por la guerra comercial que él mismo desató.