“Desde el Gobierno van a presionar al campo para que liquide”, dispara desde el vamos Hernán Schvarz, titular de la consultora ETR.
Mayo suele ser el mes de temporada alta de la liquidación de los agrodólares. Sin embargo, el mes pasado se liquidaron 19% menos que en el mismo mes del año pasado, según la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entidades que representan el 40% de las exportaciones argentinas.
“Hay mucha tensión en el sector con el Gobierno”, coincide Mauro Cognetta, asesor financiero. “En todo el sector exportador se ve la subfacturación de exportaciones y la sobre facturación de importaciones. En esta época del año es donde más dólares debería contar el país y estamos perdiendo reservas”, agrega.
En el primer semestre es cuando más divisas se liquidan, está la cosecha gruesa y lo que marca hoy es que quienes liquidan no lo están haciendo: “El campo también tuvo la característica que parte de lo que tenían acopiado lo liquidaron el año pasado por miedo al nuevo gobierno, así que ahí hay una mezcla de cuestiones. Lo cierto es que el que exporta no liquida y el otro importa todo lo que puede para cubrirse”, advierte el analista Manuel Adorni.
Gustavo Neffa, director de Research for Traders, señala que el BCRA salió a ponerle más trabas al acceso al mercado para contener la baja de las reservas de libre disponibilidad, que según sus cálculos están en torno a u$s 9300 millones.
“Hubo preocupación en el campo porque creen que los depósitos a plazo valor soja y dólar puede ser un primer paso en algún mecanismo que los obligue a liquidar más. Pero para que el exportador tenga algo que liquidar el productor tiene que estar dispuesto a vender. Y no parece sencillo obligarlos a vender”, diagnostica Luis Secco, titular de Perspectivas Económicas.
Para Mariano Otálora, director de la Escuela Argentina de Finanzas Personales, la dinámica del dólar es al margen de la liquidación del campo: “Siempre que hay cepo y un aumento de la brecha cambiaria genera mayor especulación y un delay a la hora de liquidar, a la espera de un sinceramiento del tipo de cambio. Un arreglo con los bonistas puede quitar presión al tipo de cambio y empezar a recomponer reservas en el corto plazo”.
Para el tributarista Iván Sasovsky influye la expectativa de que el tipo de cambio oficial sobre el cual se liquidan las exportaciones tienda a subir por el mero paso del tiempo y, por otro lado, la propia baja del Río Paraná afecta el nivel de exportaciones, y el propio Estado toma nota difiriendo el pago de los derechos de exportación.
“La gran diferencia con el 2019 es que no había obligación de ingreso y ahora sí, sin embargo el sector agroexportador está vendiendo actualmente unos u$s 100 millones por día. El problema es que a pesar de ello el BCRA tenía que salir a vender dólares. Con la batería de nuevas medidas achicaron mucho el mercado y el BCRA pudo volver a comprar dólares y no perder más reservas”, aclara el analista Matías Cartier.