El Comité de Acreedores de Argentina (ACC, por sus siglas en inglés), compuesto por fondos como BlackRock, Greylock Capital, Fidelity y T. Rowe Price Group, entre otros, que concentran los principales bonos emitidos en los últimos años, rechazó la propuesta que presentó el viernes el Gobierno para reestructurar unos u$s 68.842 millones de deuda bajo ley extranjera.
"El ACC ha revisado la propuesta hecha por Argentina y lamentablemente no puede apoyarla", expresó este lunes en un comunicado.
Los tenedores de bonos tildaron de "oferta unilateral" a la propuesta encabezada por el ministro de Economía, Martín Guzmán, y delinean una "solución viable", que implica "contribuciones equitativas" (aceptar una fuerte quita) a cambio de que el Gobierno se comprometa a mostrar un programa económico macro sustentado en "políticas concretas y factibles".
Además, los acreedores privados reiteraron su pedido para que la Argentina haga reformas estructurales en su economía. En otras palabras, que siga un sendero de ajuste fiscal que permita generar los excedentes necesarios para el repago de la deuda.
Los bonistas de la Argentina representados en el ACC son inversores internacionales como compañías de seguros, oficinas familiares, fondos comunes de inversión y administradores de carteras.
El comunicado
El ACC informó este lunes que "el único modo viable de conseguir una resolución para la sostenibilidad de la deuda argentina es a través de negociaciones de buena fe, las cuales dependen del oportuno intercambio de información económica, sustentada en políticas concretas y factibles".
"Esa información y políticas no han sido compartidas, y el proceso seguido por Argentina antes de su oferta unilateral ha quedado muy por debajo de las expectativas de los tenedores de bonos, no habiendo existido discusiones significativas", agrega el comunicado.
Al respecto, indican que "en la medida que Argentina esté preparada para entrar en un proceso de negociación de buena fe, el ACC cree que es aún posible alcanzar una solución sustentable a la crisis de deuda argentina".
"El ACC considera que un amplio grupo de tenedores de bonos está dispuesto a hacer una contribución equitativa a través de una concesión sustancial en las obligaciones durante el período que sea necesario para la implementación de políticas económicas, incluidas medidas estructurales", ampliaron.
Los acreedores externos invitaron a la Argentina a "abandonar el camino unilateral y comenzar una verdadera negociación".
Los bonistas, dicen, están de acuerdo con la premisa establecida en los Lineamientos de Deuda de Argentina sobre la necesidad de evitar los ciclos de expansión y crisis, los cuales han desembocado en las reestructuraciones de deuda.
"Sin embargo, una razón clave de estos ciclos ha sido la inhabilidad de Argentina de adherir a políticas que permitan que la economía funcione a niveles altos de equilibrio, elevando estándares de vida y colocando a la deuda argentina en un sendero sostenible consistente con el potencial subyacente del país", plantearon.
"Como ha ocurrido en el pasado, un retorno a la práctica de periódicamente externalizar ajustes en los tenedores de bonos internacionales –quienes esencialmente representan ahorros extranjeros frutos del esfuerzo– no conseguirá el objetivo de alcanzar una solución sostenible para la deuda argentina", sostuvo el ACC.
Este Comité informó que "continúa predispuesto y listo para trabajar constructivamente con Argentina y otras partes interesadas en una solución negociada, reflejando exigencias de corto plazo y objetivos sustentables de largo plazo".
Rechazo de tenedores de bonos K
Por su parte, el Grupo de los Titulares de Bonos de Canje, que conglomera a los poseedores argentinos de los títulos emitidos en las reestructuraciones de 2005 y 2010 que realizaron las administraciones de Néstor y Cristina Kirchner respectivamente, rechazó la propuesta del Gobierno por ser "unilateral" y "no tener en cuenta" la postura de los bonistas.
"La propuesta de la Argentina no representa el resultado de negociaciones de buena fe, por lo que el Grupo de Titulares de Bonos de Canje la considera inaceptable y no tiene intención de apoyarla", indicaron, por medio de un comunicado.
Y añadieron: "El Grupo de Titulares de Bonos de Canje sigue disponible para trabajar de buena fe con la Argentina para enfrentar sus desafíos y para presentar propuestas realistas que puedan proporcionar a la Argentina un camino consensuado hacia una carga de deuda sostenible".
Este conjunto actualmente posee, en conjunto, más de u$s 4000 millones de capital, o más del 16% del total de los bonos emitidos por la Argentina bajo los acuerdos de 2005 y 2010.
"El Grupo está y estuvo siempre disponible para buscar de una manera constructiva una solución en la que todas las partes contribuyan equitativamente a una carga de deuda sostenible respaldada por políticas apropiadas", señaló.