El informe de Evolución de la Distribución del Ingreso (EPH), que elabora el Indec, registró en el último trimestre de 2018 un aumento de la brecha entre el ingreso entre el 10% de la población que más gana y el 10% menos percibe.
El coeficiente de Gini, la herramienta para medir la diferencia, se ubicó en 0,434, muy por encima de los 0,417 que había marcado en el último trimestre de 2017. Esa medición había sido la más baja de la era de Mauricio Macri. El coeficiente de Gini tiene un valor que va desde 0 (igualdad absoluta) a 1; mientras más alto sea, indica una mayor desigualdad.
La marca, si bien elevada, se ubicó igualmente por debajo del mayor guarismo registrado durante el gobierno de Cambiemos, cuando en el tercer trimestre de 2016 midió 0,451.
Asimismo, el 10% más rico de la población tuvo, en promedio, ingresos 20 veces mayores al 10% más pobre, durante los últimos meses de 2018. Un año antes la diferencia era 17 veces mayor.
En efecto, el Indec dio cuenta de que el 10% de los hogares más ricos concentró a fines del año pasado el 32,3% de los ingresos, mientras que el 10% más pobre solo el 1,6%. A finales del 2017 esa relación era de 31% contra 1,8%.
De acuerdo con los datos del informe, el ingreso per cápita promedio mensual en la Argentina fue de $ 11.231 en el último trimestre del año. Esta cifra marca un incremento nominal del 27,5% frente a igual período de 2017.
Según el Indec, hay en la Argentina 16.917.316 personas con ingresos, estimación que contempla salarios, jubilaciones, pensiones u otro tipo de haber. En tanto, hay 10.908.151 argentinos que no perciben ingresos (incluye jóvenes y adultos mayores).
Si se observa el ingreso individual, integran el 10% más rico del país aquellos que ganan al menos $ 35.000 al mes, mientras que la mitad de los argentinos con ingresos perciben menos de $ 15.600 mensuales.
A su vez, según el Indec??????, el 20% de la población con mayores ingresos -al menos $ 27.000 mensuales por persona- se apropian del 44,7% del ingreso total.