El súper cepo al dólar que implementó el Banco Central (BCRA) a mediados del mes último para cuidar sus reservas lejos estuvo de traer los resultados esperados. El 15 de septiembre, día en el que se anunciaron las restricciones, había u$s 17.380 millones de depósitos privados. Un mes después (el 16 de octubre, último dato disponible) bajaron a u$s 15.286 millones.
Esta cifra representa menos de la mitad de lo que había antes de las elecciones PASO. Hasta el 9 de agosto de 2019, los depósitos se encontraban en franco ascenso, hasta llegar a un récord de u$s 32.492 millones. Pero en los últimos 14 meses se perdieron más de u$s 17.000 millones que los ahorristas retiraron de los bancos. En rigor de verdad, en muchos casos quedaron en el banco, pero salieron de cajas de ahorro para pasar a cajas de seguridad.
"Desde el endurecimiento de los controles cambiarios la incertidumbre macro aumentó. Y se manifestó en mayor brecha cambiaria, venta de dólares del BCRA y caída de depósitos en dólares. Esto último, sumado a la percepción que el BCRA cuenta con escasas reservas netas, potencia la salida de depósitos", advierte Amilcar Collante, de Cesur.
De todos modos remarca que hoy los bancos tienen liquidez suficiente en dólares: entre dólares físicos en entidades financieras y encajados en el BCRA, cuentan con el equivalente al 90% de los depósitos privados en moneda extranjera.
A su juicio, para detener este goteo, es necesario que el Gobierno presente un plan integral, que muestre un sendero de ajuste del déficit fiscal y acelere la negociación con el FMI.
Andrés Méndez, titular de AMF Economía, agrega que la caída de depósitos no está en el máximo de descenso que se registró sobre fines de setiembre, pero es persistente en u$s 70 millones diarios: "Aún en la hipótesis de una caída más suavizada que la que se registró en la última semana de septiembre, este ritmo de descenso representa el equivalente a un 9% mensual. No se advierte que pueda detenerse la salida de depósitos en dólares pese al elevado respaldo existente".
El analista Mauro Cognetta suma otro factor de presión: "Dijeron que le iban a dar volatilidad al dólar oficial y eso no ocurrió, no acompaña los movimientos de los dólares libres, y eso el mercado lo percibe. Guzmán ya dijo que al gasto público no lo van a bajar, entonces con la expectativa de que va a haber mayor gasto, el dólar no tienen otro sentido que hacia arriba".
Alejandro Banzas, de Reporte Económico, también destaca el nivel de liquidez actual del sistema financiero. Al respecto explica que no debería crear ningún tipo de preocupación, ya que la salida de depósitos fue acompañada por la caída de préstamos.