Con fuerte retroceso en el comercio y la industria, la economía se desplomó en noviembre un 7,5% en la variación interanual, informó esta tarde el Indec. Es la caída más pronunciada desde agosto de 2009, cuando se observa la serie original del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE).
En la variación frente a octubre, la economía cayó 2,3% de acuerdo al indicador desestacionalizado. Así, acumuló una disminución de 2,2% entre enero y noviembre, frente a igual período de 2017. Los analistas vaticinan que la economía terminó el 2018 con una contracción en torno al 2%. El Fondo Monetario Internacional prevé que el PBI terminará evidenciando una baja de 2,8%, mientras que el presupuesto incluyó una proyección de contracción de 2,4%.
Ayer el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, dijo desde el Foro Económico Mundial en Davos que la economía argentina terminará con una caída de 2% en 2018. Para este año reiteró la previsión contenida en el presupuesto, de una disminución del PBI de 0,5%, aunque en Hacienda ya trabajan con una perspectiva más optimista, de crecimiento nulo.
Para Juan Ignacio Paolicchi, de EcoGo, de mantenerse el mismo nivel durante diciembre de este año, la caída del cuarto trimestre contra el mismo período de 2017 alcanzaría el 6,2%.
“Si se hace el mismo ejercicio, el año cerraría con una caída promedio del 2% mientras que te dejaría un arrastre estadístico de 3,8% para el año que viene (es decir, de mantenerse el mismo nivel durante 2019, la caída anual alcanzaría el -3,8%)”, proyectó. “Nosotros estamos proyectando una recuperación en la zona del 0,5/0,7% trimestral que cerraría el año con una caída anual de 1,8% en 2019”, agregó.
En noviembre del año pasado, las ramas de actividad con mayor incidencia en la contracción interanual del EMAE fueron comercio mayorista, minorista y reparaciones, con una caída de 17%; le siguió la industria manufacturera, con 12,6%, y transporte y comunicaciones, con 4,9%. De los 15 sectores de actividad, sólo cuatro crecieron: agricultura, ganadería, caza y silvicultura, con 1,9%; enseñanza, con 1%; electricidad, gas y agua, con 0,7%, y servicios sociales y de salud, con 0,5%.
Para este año las estimaciones incluyen la recuperación del agro que, tras la sequía en 2018 que hizo comprimir la cosecha gruesa y achicó la producción de soja, traccionarán a la actividad.