La venta de una propiedad será un 1,5% más barata, de aprobarse la Ley Ómnibus que Javier Milei envió el miércoles al Congreso. Es que, entre sus 664 artículos, el proyecto dispone quitar el Impuesto a la Transferencia de Inmuebles de Personas Físicas y Sucesiones Indivisas (ITI). Para el sector inmobiliario, esta iniciativa y la derogación de la Ley de Alquileres, establecida en el DNU que el Presidente había firmado la semana pasada, se convierten en dos factores fundamentales para incentivar las operaciones de compra-venta de inmuebles, que actualmente se encuentran en mínimos históricos (en torno a las 4000 escrituras mensuales en la Ciudad de Buenos Aires).
El impuesto ITI, que rige desde 1991 bajo la Ley 23.905, es del 1,5% del valor total del inmueble. Es decir, en una propiedad de u$s 150.000, representa un valor de u$s 2250, lo que en pesos -al tipo de cambio oficial- se traduce en $ 1,89 millones.
"Hay un doble impacto. Por la devaluación, todos los impuestos, que se pagan tomando en cuenta el tipo de cambio oficial, se encarecieron, lo que generó que, hoy, las operaciones inmobiliarias sean más costosas. De eliminarse el ITI, se corrige este aumento", explicó Fabián Achával, dueño de la inmobiliaria que lleva su nombre.
Hay que recordar que, entre las primeras medidas que tomó el flamante Gobierno, se dispuso un nuevo tipo de cambio oficial, que pasó de $ 375 a más de $ 800. Es decir, los impuestos inmobiliarios se duplicaron en 24 horas.
"De sancionarse la ley, es muy positivo porque incentiva la compra-venta de inmuebles", retoma Achával. Suma a esto la derogación de la Ley de Alquileres, que ya hizo que la oferta de inmuebles subiera 15% en el último mes. "La inversión de un inmueble para la renta vuelve a ser una opción segura", dijo el empresario.
"Esta iniciativa, que convierte a los inmuebles en bienes más económicos, junto a la derogación de la Ley de Alquileres y al blanqueo que se quiere establecer, son tres medidas positivas, que, claramente, generarán una activación del mercado", coincidió Iván Ginevra, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA).
Desde 2018, el ITI convive con otro impuesto. La sanción de la Ley 27.430, en 2017, determinó que los inmuebles que se hayan comprado a partir del 1 de enero de 2018 en adelante no pagarían el ITI cuando se vendieran, sino que estarían sujetos al Impuesto a las Ganancias Cedulares, que grava la diferencia entre la compra y la venta.
Por ejemplo, si una persona compra a un departamento por un valor de u$s 100.000 y vende a u$s 150.000, la utilidad es de u$s 50.000 y sobre esto se debe calcular el 15% de ganancias celulares, lo que asciende a u$s 7500. Este impuesto seguirá vigente, ya que no está modificado por la Ley Ómnibus.
"Hay que ver como impactan en el mercado inmobiliario el DNU, la Ley Ómnibus y, también, la devaluación del peso frente al dólar oficial. Son iniciativas positivas. Se debe analizar todo el conjunto para hacer una radiografía general", evaluó Achaval.
Según los últimos datos del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, en noviembre, se registraron 4068 operaciones de compraventa, que sumaron un monto total de $ 132.080 millones. Sólo por esas operaciones, la recaudación del ITI habría sido de $ 1980 millones.
Un segundo semestre positivo
Si bien en el mercado inmobiliario son prudentes con el futuro del sector, hasta ahora, las medidas anunciadas por el Gobierno les sientan bien.
"Veníamos en los últimos cuatro meses del año con un veranito inmobiliario. El punto de partida es positivo. No es claro que va a pasar en los próximos meses pero los cambios son alentadores", explicó Achaval.
Por su parte, Alejandro Bennazar, ex presidente de CIA, sostuvo que el blanqueo de capitales que también está incluido en la Ley Ómnibus impactará en el primer semestre. "Creemos que se van a dar muchas operaciones de ticket bajo de u$s 100.000. Esto va a dinamizar un mercado que viene recuperándose", sostuvo.
Con respecto a los precios, Bennazar reconoció que, actualmente, el mercado "está de remate". "Los valores que hoy se están manejando van a subir en marzo o abril. Esto hará que muchos se apuren a concretar ahora las operaciones. La quita del ITI es un incentivo más", finalizó.