El salto que el dólar pegó la semana pasada todavía no se empezó a reflejar en los precios de los alquileres. La falta de actualización de los salarios dificulta la actualización de los valores y la rentabilidad, que aún no se había recuperado de la devaluación de 2018, está en un piso histórico.
Empresarios del sector de real estate coinciden en que no hay margen para empezar a negociar contratos más altos, especialmente en el caso de locación de viviendas. El momento para ello, agregan, será a partir de que se empiecen a cerrar las paritarias.
"Los alquileres no pueden seguir los movimientos del dólar, por eso en los próximos meses vamos a ver una relativa calma en cuanto a valores. Cuando los salarios empiecen a aumentar, veremos qué pasa. Pero en los últimos años, siempre lo hicieron por debajo de la inflación", explicó Ignacio Mel, gerente Comercial de Mel Propiedades, inmobiliaria con presencia en los barrios porteños de Palermo y Villa Urquiza.
Para los alquileres vigentes en dólares, agregó, se está conversando para bajar ese monto, de modo que casi no haya incremento en pesos.
Los nuevos contratos se están negociando con cláusulas de actualización más elevadas,aunque no tanto como se podría esperar. Así, si hasta principios de mes se pactaba un ajuste del 15% semestral, ahora se arregla que el incremento será del 17% en el mismo período.
Lady Siebenhaar, dueña de Soluciones Inmobiliarias Nativa, que opera en Recoleta, indicó que a los inquilinos no se les puede pedir más que eso. Del otro lado del mostrador, les dice a los dueños que deben entender que esta es la realidad actual del mercado.
"Los propietarios se quejan de la baja rentabilidad, pero yo les digo que son solo dos años de contrato. Esperemos que cuando esas unidades vuelvan al mercado, se haya recompuesto un poco la situación", agregó.
En el mercado aseguran que se preveía que la incertidumbre electoral tuviera incidencia en el sector. Sin embargo, una devaluación como la de la semana pasada no estaba en los cálculos de casi nadie y, sobre todo, no se esperaba que hubiera movimientos significativos antes de octubre.
Así, con precios de venta que se mantienen estables en dólares, los propietarios ven que la rentabilidad a la que pueden acceder está cerca del piso histórico. Hasta la semana pasada, destacó Mel, estaba en un promedio del 2,8% anual y tras la devaluación ya se ubica en torno del 2,3%.
Pese a ello, nadie quiere vender y son pocos los que decidieron retirar del mercado de alquileres sus propiedades, incluso temporalmente hasta que el panorama sea más claro.
"Hay tres opciones cuando se tiene una propiedad. Venderla, alquilarla o tenerla vacía. Lo que estoy viendo es que los que querían vender y ahora se fueron para atrás se volcaron al mercado de alquileres. Y casi no hay quien opte por tenerla vacía, se hacen los ajustes necesarios para que se alquile", aseguró Hernán Siwacki, socio gerente de Capital Brokers, inmobiliaria que opera en Palermo y Colegiales, que detalló que en estos días están gestionando varios contratos de alquiler, en los que se están conversando más que nunca precio y modalidad de actualización.
En los próximos meses, la incertidumbre electoral hará que el mercado de compraventa de inmuebles esté más bajo de lo normal. Por ello, explicaron, es posible que, incluso, crezca el número de propiedades disponible para alquilar.
"Incluso con baja rentabilidad, el dueño por ahora sigue ofreciendo su propiedad en el mercado. Lo que obtiene al año puede ser poco, pero ve que en dólares su capital aumenta año tras año", concluyó Mel.