El mayor endeudamiento para financiar el déficit fiscal y la devaluación están llevando al rubro intereses a colocarse en el segundo rubro de gastos del sector público, detrás de las prestaciones sociales, tras aventajar a los subsidios económicos el año pasado y el gasto en obra pública en el transcurso de este 2018.
Al considerar el gasto devengado, los intereses ya ocupan el segundo puesto: un 15,27% del total a julio pasado (desde el 11,65% del mismo período de 2017), según Asociación Argentina de Presupuesto y Admnistración Financiera Pública (ASAP), detrás del gasto en prestaciones de la seguridad social del 42% del total.
"Fuera de alguna posible diferencia de caja, los intereses van a terminar siendo el segundo ítem del gasto", pronosticó Rafael Flores, vocal de ASAP.
"El impacto del tipo de cambio es lo que hace que los intereses peguen un salto grande. Y todavía se verá en los primeros meses del 2019, al comparar el primer trimestre de este año con un dólar a $ 20", explicó Flores. "Hasta que no se llegue al superávit primario no se puede bajar la carga de intereses", agregó el especilista.
También, a Elena Highton de Nolasco como vicepresidente. A partir de enero será el nuevo titular del máximo tribunal. Ricardo Lorenzetti deja su cargo luego de casi 12 años al frente de la Corte.
Al considerar el gasto base caja, con un 11,1% del total, este año los intereses ocupan el tercer lugar detrás del gasto en remuneraciones y en bienes y servicios (16,3%) y las prestaciones sociales (52,4%), según los datos oficiales de los primeros siete meses del año.
En 2017 los intereses (8,6%) estaban por debajo del gasto en capital (8,8%), que hoy bajó al 5,8% del total. En 2016, los intereses (6,4%) estaban por debajo de los subsidios (11,8%), que hoy bajaron al 7,1%.
En el Presupuesto de 2019, se espera que ganen aún más participación dado que para el año electoral se ajustarán aún más los gastos que no sean prestaciones sociales.
"Con el equilibrio primario, los ingresos del Estado sirven para pagar todos los gastos menos los intereses. Pero igualmente se requiere financiamiento para pagar los intereses. Hay que ver si se logra bajar la desconfianza de los mercados para poder endeudarse a tasas más razonables. Con la caída del gasto primario, va a aumentar la participación de los intereses en el total", explicó Flores.
En términos del PBI, los intereses pesan 2,4% este año, detrás de las prestaciones sociales (6,7%), pero por delante del gasto de funcionamiento (2,1%), del gasto en capital (0,7%) y de las transferencias a provincias (0,3%), según datos de la consultora Ledesma. En 2017, los intereses pesaban 2% del PBI, por debajo del gasto operativo (2,3%).
"Los únicos gastos que suben en porcentaje del total son los intereses y el gasto social. El resto cae", planteó Gabriel Caamaño, economista de Ledesma. "Lo de los intereses es el resultado esperable del proceso de endeudamiento para financiar el déficit primario, tasas en alza y ajuste del tipo de cambio nominal".
"Hemos concentrado los esfuerzos sólo en la mitad del gasto primario. Los intereses suben por sí mismos y los demás gastos bajan por sí mismos, ergo, el peso relativo de los intereses en el gasto sube", agregó Caamaño.
El hecho de que sea uno de los pocos gastos que ajusta por moneda extranjera redunda en que la cuenta intereses avance en términos reales.
"Refleja la política de financiamiento del gasto con mayor endeudamiento. Ese endeudamiento se fue haciendo relativamente más caro período a período. Aunque se financie un nivel similar de gasto, se hizo con un costo más elevado, por el aumento del riesgo que se reflejó en la tasa y porque mucho endeudamiento es con el sector externo. Esos intereses en moneda extranjera crecen en pesos y ganan participación", dijo Ariel Barraud, economista de Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).
Si bien el financiamiento del FMI es más barato que el del mercado, se observa que la incertidumbre que genera eleva el costo promedio del endeudamiento.