Molinos Río de la Plata cerró el primer trimestre del año con una pérdida neta de $ 114 millones, que, según la empresa, está “asociada a la imposibilidad de trasladar los aumentos de costos a los precios de su cartera de productos”.
En un comunicado, la empresa agregó que este rojo trimestral “representa una caída de $ 1.089 millones en sus resultados respecto del primer trimestre del año anterior”.
En el primer trimestre de 2019, la empresa alimenticia que controla la familia Perez Companc había anunciado una ganancia neta de $ 657 millones (moneda de 2019), en parte gracias a las operaciones de venta de la empresa italiana Delverde y la adquisición de La Salteña. Pero, también y sobre todo, gracias al “impacto contable no recurrente en el cargo por impuesto diferido, producto de la revaluación fiscal de los activos fijos, por $ 692 millones”, había explicado entonces.
En el primer trimestre de este año, la empresa informó que “las pérdidas en el resultado se dieron a pesar del crecimiento de volumen de casi 10%, impulsor del incremento en los ingresos operativos que alcanzaron en el período $ 9224 millones; y de un 18,2% de baja de gastos centrales, producto de la continuidad de los programas de eficiencia y productividad”. Sin embargo, la empresa aclaró que “los costos por ventas se incrementaron un 6,5%, el doble de los ingresos operativos, lo que resultó determinante para el resultado del trimestre”. Por eso, Molinos destacó que las pérdidas registradas se deben a que “los incrementos de costos no trasladados en su totalidad a precios impactaron en un significativo deterioro de su margen bruto”.
En el comunicado, la compañía, una de las mayores fabricantes de alimentos de la Argentina, dijo que “espera poder adecuar sus precios, al menos parcialmente, al incremento de costos que viene soportando; siendo esto crítico para equilibrar los resultados”. Al mismo tiempo, Molinos informó que “continuará enfocada en desplegar la fortaleza de sus marcas para potenciar el crecimiento, apoyados en los programas de productividad y modernización implementados en los últimos años”.
Molinos Río de la Plata había cerrado 2019 con pérdidas por $ 1006 millones. Así, la empresa acumuló su tercer balance consecutivo en rojo. En términos de moneda de 2019, había obtenido un resultado negativo de $ 1161 millones en 2017 y de $ 2619 millones, en 2018. Es decir, acumuló cerca de $ 5000 millones ($ 4846 millones) al cabo de estos tres ejercicios.