La salida de la recesión está cada vez más cerca, al menos eso piensan en despachos oficiales. En base a los últimos indicadores de actividad económica, el segundo trimestre de 2019 sería el primero con crecimiento después de cinco trimestres consecutivos con bajas intertrimestrales. Así, si en los próximos meses se ratifica este giro, se llegaría a las elecciones generales del 27 de octubre con dos trimestres consecutivos de crecimiento de la actividad económica, lo que técnicamente marcaría el fin de la recesión.
El Monitor de la Economía Real, que elabora el Ministerio de Producción y Empleo relevando numerosos indicadores, da cuenta de una relativa mejora de la economía. El dato que cambió el humor en el elenco gubernamental es que la actividad se expandió en mayo 2,6% en relación al mismo mes de 2018, creciendo por primera vez en doce meses. Este dato "confirmó el cambio de tendencia y una mayor difusión a los sectores productivos", precisó el documento.
La mejora en algunos indicadores de actividad, así como el comercio exterior, la producción de granos (soja y maíz, esencialmente) y en sectores vinculados al agro (maquinaria agrícola), la energía (gas) o los servicios (turismo receptivo), incluso la construcción, se suma a la desaceleración de la caída en varias industrias. Básicamente, esto es lo que está detrás del optimismo oficial.
El Gobierno ve que el fin de la recesión está cerca. "Con los últimos datos, la probabilidad de salir de la recesión es la más alta desde principios de 2017. En mayo, alcanzó el 40,4%, y sugiere que la economía afianzaría su tendencia positiva en los próximos meses", destaca el Monitor de la Economía Real. Y aclara que indicadores de junio señalan que "en el segundo trimestre la economía volvería a crecer luego de cinco períodos de bajas intertrimestrales".
En su visión, hay buenas señales que se reflejan en las mejores expectativas sectoriales para los próximos meses. Para las empresas industriales habría mejoras en la demanda interna y las exportaciones, mientras que en la construcción, mejoraron las expectativas en empresas vinculadas a la obra privada. En el comercio habría desaceleración de la caída por mayores ventas y "expectativas de los consumidores, que se encuentran en el mejor nivel en un año y medio".
Sin embargo, la inflación continúa en niveles elevados, aunque con tendencia a la baja, el consumo aún no despega y el empleo, claramente sigue en baja. Según informa la Secretaría de Transformación Productiva con datos del SIPA, a mayo se perdieron 168.716 empleos registrados en el sector privado, tomando los últimos doce meses, de los cuales 67.000 fueron en la industria y 50.000 en el comercio, números más o números menos.
Éste es hoy, sin dudas, el talón de Aquiles de la economía. Con este panorama laboral y una inflación persistente, es difícil que el consumo reaccione positivamente, aunque el programa Ahora 12 y otras promociones (autos, motos, etc) constituyen incentivos reales.
Exportaciones e industria
La foto no puede ser más gráfica. Las exportaciones vienen sosteniendo el ritmo en los últimos diez meses y la balanza comercial registró su mayor superávit para el primer semestre (u$s 5589 millones) desde 2012. Sin embargo, hay al menos dos lecturas que se desprenden de estos datos.
En primer término, que las exportaciones se mantienen más o menos estables y no crecen respecto al año anterior, pese a la fuerte devaluación del peso, en parte porque Brasil no tracciona como se pensaba que lo haría. En segundo lugar, la balanza comercial es positiva por el desplome de las importaciones, que al cabo del primer semestre se contrajeron 27,9%, debido a la recesión reinante en el país.
Pese a ello, el Monitor de la Economía Real destaca las posibilidades que se presentan en materia de comercio exterior. Más allá de la oportunidad que significa el acuerdo alcanzado el pasado 28 de junio entre el Mercosur y la Unión Europea, las exportaciones de combustibles y energía aumentaron el mes pasado por quinta vez en lo que va del año. Sólo en junio crecieron 59%. También se registraron mejoras en las exportaciones de economías regionales.
Pero una mirada más detallada del perfil exportador indica que el envío de productos primarios creció 11% en cantidades en junio, mientras que las manufacturas de origen agropecuario se expandieron 33%,con nueve meses seguidos de suba. En tanto, las manufacturas de origen industrial cayeron 11,9% en el sexto mes del año.
La ventana exportadora es la demanda que necesitan muchas industrias para mejorar su magro desempeño en el año. Según el Monitor de la Economía Real la producción automotriz se desplomó 33% en el primer semestre, afectada por menos ventas a Brasil. Por su parte, la fabricación de maquinaria y equipos se contrajo 15% en mayo y la de químicos el 3%.