La crisis movió la estantería en el mercado de materiales para la construcción, pero no solo para los que se usan para las grandes obras públicas sino también para los artículos de terminación de obras, remodelación y decoración que venden las grandes cadenas de ‘todo para el hogar’. A pesar de que no trasladaron a precios todo el peso de la devaluación, esos retailers coinciden en voz baja que la caída en la demanda llega supera el 5% y que “la baja va a ser mucho más pronunciada en lo que queda del año”.
Desde el lado de los productores, el panorama es bastante desalentador, señala Daniel Muñiz, director Comercial de Parex Klaukol y miembro del Grupo Construya, una entidad que agrupa a once empresas líderes del rubro. “Notamos una desaceleración a partir de mitad de año y mes a mes parece que la tendencia a la baja se profundiza cada vez más. Creemos que en el acumulado de 2018, las ventas van dar negativas por primera vez en octubre”, destacó Muñiz.
Según los datos que maneja la industria, cuando hay una baja en el PBI, la caída en la venta de materiales para la construcción se multiplica por cuatro. Hasta septiembre, producto de un muy buen primer semestre, el Índice Construya (que muestra en volúmenes la evolución de las entregas) mostraba un crecimiento de apenas 0,4 % en comparación con el mismo período de 2017.
Los próximos meses, admite Muñiz, serán los más duros, porque el último trimestre del año pasado había sido especialmente bueno.
“La caída va a ser mucho más pronunciada en lo que queda de 2018”, señaló y agregó que hay una combinación de factores que frenan la actividad: la elevada inflación de los últimos tres meses y una plaza que no tiene pesos.
Desde uno de los grandes retailers del sector confiesan que las ventas cayeron alrededor del 5% en septiembre. El número es sensiblemente más bajo que el 14% que arrojó el Índice Construya, lo que se explica porque ante el freno en la demanda, los minoristas acumulan grandes inventarios y no compran tanta mercadería a los proveedores.
“No tuvimos una reacción única ni uniforme en los últimos meses”, destacan desde una de las cadenas líderes de materiales para la construcción, que explicó que la primera reacción de los consumidores tras la devaluación de agosto fue adelantar las compras de materiales para adelantarse a la suba de precios. Se trató d quienes ya estaban con reformas en sus hogares o que tenían prevista la realización de alguna obra en el cortísimo plazo. Esto, aseguran, sucedió sobre todo en productos como grifería, sanitarios, pintura y cerámicos.
En estos grandes centros que venden desde ladrillos hasta plantas para el jardín, aseguran que decoración fue el rubro que cayó con más fuerza en los últimos meses. Porque, aunque está dolarizado y ya se descuenta que sufrirá un aumento, es “prescindible”.
“En octubre vimos que hay una mejora y que ya comienza a estabilizarse. Eso sí, en niveles más bajos que el año pasado”, destacó Darío Giarrocco, director general de Häfele Argentina, una empresa productora de herrajes.
Ahora, destacaron los retailers, empezó a verse un leve repunte de la venta de hierros, ladrillos y otros materiales para la etapa de inicio de obra. Según indicaron, se trata de quienes ya contaban con los planos aprobados para sus proyectos y tienen dólares, personas que ven que hoy los precios para construir están hasta un 30% más bajos que hace apenas medio año, aunque tal vez no empiecen la obra ya mismo.