Thol es una de las empresas nacionales que produce diseños de última generación y fabrica grifería en bronce que luego se croma o niquela según el caso. El cromo es lo que más se difunde, queda más compacto e impermeable por lo que resulta fácil de limpiar y evita que se adhiera el sarro.
La línea “Zaha”, moderna extra chata y líneas puras, ronda los $ 1.800 el juego.
Las colecciones son completas e incluye hasta los accesorios lo cual representa una ventaja en relación al resto de la oferta extranjera que muchas veces es bastante acotada.
Liliana Cavanna diseña para Andez, otra firma nacional, también fabrica versiones completas: griferías para hidro, bidé, lavatorio y bañera, con sus respectivos accesorios incluso la escobilla y el dosificador de jabón. “Jazz” es una colección interesante moderna y clásica, combina cromo con níquel o satinado y lleva cierre cerámico.
Robinet en cambio, nacional también, ofrece colecciones más coloniales trabaja cierre cerámico y cuerito con memoria, ideal para zonas donde el agua es dura, al ajustarse vuelve a la posición correcta y evita el goteo. Es la única firma de alta gama en el país que aplica esta tecnología. La mayoría de las colecciones son color cobre, en otras los combina con satinado, niquel mate, cromo y logra muchos detalles interesantes en los diseños. El juego cuesta alrededor de $ 2.200.
Colecciones celeste y blanco
(Por Andrea Soria) Las marcas de reconocida trayectoria como FV, no siempre ofrecen los diseños completos que facilitan distinguir el baño. No obstante, algunas empresas nacionales, abren el abanico con opciones muy seductoras. La mayoría de cromo porque combina con todo, entre otras ventajas.
La tendencia es la pureza de las líneas, nada rebuscado, fácil de limpiar y de diversas formas que acompañan con gran soltura la arquitectura casi protagónica, que ha cobrado el baño y la cocina.