Para comenzar el diálogo, Germán Viceconti, coordinador de nuevos negocios de NeuralSoft, emite una afirmación que deberá ser altamente considerada: “la adopción de nuevas tecnologías sólo tiene sentido cuando su uso genera un impacto cuantificable y medible muy superior a lo que se pague”, sostiene y agrega que “no es necesario incorporar porque sí o por decir: 'me mantengo actualizado', 'me renuevo' o 'no me quedo atrás', lo ideal es reunirse con el proveedor seleccionado y realizar en conjunto un análisis pormenorizado de Retorno de Inversión del proyecto”.
Otro tema crucial en este sentido es cuánto debería invertir una Pyme en tecnología informática. Al respecto Germán considera que “si bien es cierto que cada vez más empresas invierten en tecnología, en Argentina aún estamos muy lejos de los niveles de los países más desarrollados del mundo, donde es habitual una inversión en tecnología informática de entre un 5% y un 6% de su facturación, en Argentina, las empresas que más recursos destinan, llegan, en el mejor de los casos, al 1%”. Sostiene que esto se debe a que todavía muchos lo ven como un gasto y no como una inversión. “Si se hace teniendo en cuenta lo que te señalaba anteriormente, no habría por qué temer en imitar a las principales potencias europeas o a los Estados Unidos, ya que cuanto más invierta, más voy a ganar”, agrega y afirma además que no es casualidad que esos países las empresas paguen mejores sueldos. Es sencillamente porque la tecnología les permite aumentar la productividad por empleado.
Respecto al momento ideal para evaluar realizar la actualización Germán afirma que hay empresas que toman esta decisión en menos de dos meses y otras que se toman más de tres años. “Obviamente el tiempo ideal depende de la magnitud y complejidad de cada empresa, pero como toda acción y decisión importante, debe llevarse a cabo sin prisa pero sin pausa”, sostiene y se justifica en que si se apresura el proceso de cambio o no se analizan todas las alternativas desde una perspectiva costo-beneficio, se corren altos riesgos de tomar una decisión equivocada en algo que tendrá un impacto crítico en la compañía por varios años. “Si por el contrario, se toma más tiempo que el indispensable para hacer un correcto análisis, cada día que pasa es un día más en que se pierde la posibilidad de empezar a ganar más dinero y principalmente es un día más de ventaja que le doy a la competencia”, describe.
“Para el caso de empresas que, por su grado de evolución, estén en etapa de incorporar un primer software de gestión de los llamados ‘enlatados’ el tiempo ideal es de 30 a 40 días”, afirma Viceconti, mientras que para empresas que están dando el salto de pasar a un sistema integral del tipo ERP y que vienen de un enlatado, de un desarrollo a medida o de varios software desintegrados, el tiempo ideal de decisión es de 3 a 5 meses, según su visión.
Con respecto a migrar hacia otro sistema, le consultamos si existe un tiempo promedio para realizar el cambio. “Acá ya no podemos hablar de tiempos ideales, el promedio en que lo hacen las empresas ha bajado un poco, como producto de una tendencia general a hacer todo cada vez más rápido”, afirma y agrega que “a mediados de la década pasada las empresas cambiaban sus sistemas cada ocho años en promedio y hoy lo hacen cada seis años y medio, aunque como siempre, hay extremos muy alejados, algunos cambian a los dos años y otros a los 20”, sostiene y remarca que lo importante es estar atento a que el sistema se mantenga adecuado a los requerimientos operativos y a los objetivos estratégicos.
Viceconti sostuvo además que un error muy frecuente con el que se encuentran es la contratación de servicios y productos teniendo en cuenta el costo de los mismos y el supuesto beneficio, pero sin tener en cuenta otros costos ocultos que aparecen cuando una se da cuenta que para utilizar el servicio o producto principal necesita contratar otros servicios adicionales, o comprar nueva infraestructura, o pagar licencias de aplicaciones complementarias. “Aún cuando éstos fueron tenidos en cuenta, si se contratan por separado a diferentes proveedores, cualquier incompatibilidad o discordancia entre los mismos es un riesgo muy alto que asume el cliente, la mejor manera de evitarse desagradables sorpresas es contratar todos los elementos que componen la solución a un único proveedor y preferentemente que éste sea el prestador real del servicio y no un intermediario”, finaliza.
¿Tu Pyme necesita actualizar su tecnología?
(Por Eduardo M. Aguirre - @EduAguirre) El avance acelerado de la tecnología y su creciente accesibilidad hace que cada día más Pymes incorporen tecnología para optimizar sus procesos. Conversamos con un especialista de NeuralSoft quien examina los aspectos claves a tener en cuenta para saber qué tipo de tecnología incorporar, cómo y cuándo hacerlo. Además, cuánto debería pagarse por ello.