“Buscamos generar un impacto positivo en el planeta. Nacimos en 2017, somos un equipo interdisciplinario que diseñamos programas y herramientas para que las empresas y las personas puedan mejorar su desempeño ambiental”, se presentan. Y vaya si lo consiguen: desde que nació la empresa comandada por los tres hermanos Gauna (Federico, Guillermo y Laura) llevan recuperadas 750 toneladas de residuos. Pero el recupero es solo una parte, porque a futuro, la meta es la toma de consciencia y el manejo de la huella de carbono.
Hoy se apoyan en cuatro unidades de negocio:
- Gestión consciente de residuos
- Capacitaciones y talleres de varias temáticas ambientales
- Manejo y cálculo de huella de carbono (compensación)
- Acompañamiento y consultoría en gestión ambiental
Gran parte de la facturación de la empresa viene de la gestión consciente de residuos, la primera unidad de negocios. “Allí apuntamos a que las empresas vean lo que generan, y si no ven lo que tiran, pierden la información y, por lo tanto, la toma de conciencia para promover cambios es muy difícil”, dice Federico Gauna, director de la compañía.
¿En qué consiste ese servicio? “Tiene cuatro instancias principales: la primera es la capacitación donde buscamos apelar a la toma de consciencia y que todos en la organización se sientan parte. La segunda es la instalación y entrega de insumos, que de acuerdo a cada empresa u organización, se busca la mejor forma para empezar a separar los residuos y acopiarlos. Lo que buscamos es que no se invisibilicen, sino que se empiece a ver lo que se genera, justamente, tomar consciencia. La tercera parte es el retiro y la entrega a las cooperativas que hacemos. Y ahí atendemos, de nuevo, a la necesidad de cada empresa, para determinar frecuencia en función de la generación y el volumen. Lo llevamos a la cooperativa que clasifican el material, lo acopian y se encargan de reinsertarlo en el sistema productivo. La última etapa es que le llevamos la información sobre lo que estamos recuperando para empezar a medir. Es la única forma para que puedan transformar lo que producen”, describe Fernando Córdoba, coordinador de Operaciones.
Como una pata de ese servicio, tienen una alianza estratégica con 7 cooperativas de recuperadores: La Esperanza, ReciCor, Cuadraditos, Carreros y las 3 cooperativas que trabajan con los centros verdes municipales.
Lo que tienen (y lo que podrían tener)
Solamente en Córdoba existe un padrón de más de 600.000 empresas susceptibles de ser inscriptas como grandes generadores de residuos. Y es allí donde Ecolink sale a jugar fuerte.
En la actualidad tienen 180 empresas clientes (y más de 2.500 generadores domiciliarios). Las industrias con las que más trabajan son la gastronómica y la tecnológica.
Para finales de 2022 buscan escalar a 300 el número de empresas. ¿Y en 2025? “Queremos llegar a 1.000”.
¿Dónde? Por ahora operan en Córdoba, Sierras Chicas y Oncativo. Pero el modelo puede escalarse a medida que la gente vaya tomando consciencia y se vayan generando cada vez más puntos verdes (o puntos EcoLink). Hoy son 43 puntos que la empresa tiene en la ciudad, pero allí también buscarán escalar. “De 43 a 100, y de allí a 300 para que cada vez sea más accesible y se aliviane la logística”, culminan.