Vivir en un barrio abierto de una ciudad pequeña, pero cerca de una gran urbe ofrece una combinación única de ventajas: tranquilidad, que se traduce en menos estrés, comunidad, seguridad, calidad de vida y distancias cortas, donde los vecinos se conocen; brinda espacios abiertos y naturaleza, que facilitan actividades al aire libre, y un menor costo de vida, con precios más accesibles para viviendas y otros bienes y servicios.
Cada vez son más las personas que optan por instalarse en ciudades pequeñas o medianas, buscando un nuevo proyecto de vida. Los datos del último Censo confirman esta tendencia: varios departamentos cercanos a Capital experimentaron incrementos poblacionales.
La ciudad de Pilar (a 30 minutos de Córdoba) asoma como una excelente opción, aunque aún menos conocida por el momento, para radicarse. Pilar es la ciudad que más creció entre 2010 y 2022 en el departamento Río Segundo. Su población aumentó un 26 por ciento en esos 12 años, pasando a tener actualmente casi 19 mil habitantes.
Solares del Pilar, distinto a todo
En este contexto nace Solares del Pilar, un desarrollo inmobiliario único por sus características. Se trata de un barrio abierto de 12 manzanas, con 240 lotes de 300 y 500 metros cuadrados. Y todo en una ubicación clave por sus conexiones: pegado a la ruta provincial 13 y a 800 metros de la autopista Córdoba - Rosario y a 15 cuadras de la plaza del centro de la ciudad.
“Esto permite llegar a la ciudad de Córdoba en 30 minutos, lo que nos posiciona como una buena opción para quienes trabajan en la capital. Creemos que por este sector pasa el futuro de la ciudad”, destaca Alejandro Mana, administrador del loteo. Y adelanta que ya están trabajando en el desarrollo de Solares del Pilar II, con características similares al loteo actual.
Aunque manifiesta que todavía Córdoba mira para el otro lado, asegura que más temprano que tarde vendrán a buscar lotes y viviendas a esta zona para radicarse en esta ciudad. Las razones: cercanía, accesibilidad y seguridad. “Además para ellos son muy convenientes los precios, comparados con la capital provincial”, destaca Mana. Esto ha llevado a que varios vecinos de Pilar y pueblos vecinos inviertan en Solares de Pilar como una buena opción para resguardar sus ahorros.
Allí donde hace menos de tres años había solo tierra pelada, ahora hay varias casas finalizadas con gente viviendo en el loteo y otras en construcción. Se trata, según Mana, del loteo que más avanzó en los últimos años. El lugar cuenta con todos los servicios: gas natural, luz, agua, cordón cuneta y el cableado de todo el barrio para el servicio de internet.
Aunque se trata de una zona tranquila en materia de seguridad, tienen pensado armar un sistema de cámaras y donarlas para que el municipio lo agregue a su central de monitoreo brindando más seguridad a los que se instalen a vivir en el lugar.
Además se plantaron 330 árboles. Y cuenta con un frondoso bosque de 70 hectáreas de eucalipto como telón de fondo. La vista es inmejorable: por un lado el horizonte, y por el otro el bosque de eucaliptos. Cuando el solcito calienta las siestas de invierno caminar por el barrio se convierte en un gran plan para disfrutar de la libertad que da el lugar, acompañado por el sonido de los pájaros.
También el municipio planea hacer una ciclovía en las inmediaciones del loteo.
Viviendas, llave en mano
Solares de Pilar ofrece asesoramiento integral. Esto es: “si quieren una casa terminada ya la tenemos, si quieren una a medida se la podemos hacer nosotros, llave en mano”, comenta el administrador del loteo, que aclara que el adquirente de un lote también posee la total libertad de contratar al profesional y constructor de la vivienda.
Por el momento hay dos tipologías: de dos y tres dormitorios, con una superficie de 107 y 115 metros respectivamente. “Se trata de viviendas bien funcionales”.