Con más de 50 años en el mercado inmobiliario y de obra pública, Pucheta Construcciones sigue pisando fuerte. Están desarrollando para la UNC el primer edificio del Campus Norte en Juarez Celman (con una inversión de $ 316 millones); Midland, en urca y están prontos a lanzar un condominio en Argüello (donde era el vivero sobre Ricardo Rojas), allí se financiarán a través de un Fondo Común de Inversión Cerrado (el primero para ellos y el segundo para Dracma). Hoy nos tomamos un café con Pablo Pucheta, director de Pucheta Construcciones en el SUM de Cardinales Alto Panorama de GNI.
Soledad Huespe: ¿Cuántos años tiene la empresa Pablo?
Pablo Pucheta: 55 años... El socio fundador fue mi padre Arturo, él empezó en sus primeros años construyendo casas, después tuvo una incursión bastante importante en obras religiosas, y últimamente ya hacemos obras públicas, obras privadas y también hacemos desarrollismo. Nos asociamos con Meade Inmobiliaria y tenemos una sociedad que se llama Meade Pucheta S.A., con la cual hemos encarado muchos emprendimientos. Somos socios hace más de 26 años, es una sociedad que nos ha dado muchos frutos.
SH: Vamos por partes, Pucheta es una desarrollista fundada por ingenieros civiles, lo destaco porque muchas de las desarrollistas con las que hablamos están fundadas por arquitectos...
PB: Lo que pasa es que nuestra desarrollista, en realidad, la creamos en sociedad con Meade Inmobiliaria y dentro de la inmobiliaria, uno de sus socios es José Dahan que es arquitecto. Entonces digamos es la parte arquitectónica del grupo.
SH: Se complementan allí.
PB: Sí, nosotros somos la parte constructora y del gerenciamiento de la obra.
SH: Vamos a la historia de Pucheta, hay un dato que me resulta muy interesante que tiene que ver con las obras religiosas ¿qué hacían allí?
PB: Hicimos muchas obras grandes como por ejemplo San Camilo, para las hijas de San Camilo, para un hogar de ancianos que está ahí en Los Boulevares. Es una obra, para mí, muy importante en los afectos, porque fue la obra donde me inicié como jefe de obra hacia el año ´85. Trabajamos mucho para la curia en el Arzobispado, después para congregaciones religiosas como Las Hermanas Concepcionistas, Las Hermanas del Huerto, fue una época que mi padre atendía muchas comunidades religiosas y nos permitió crecer como empresa también.
SH: Eso va muy de la mano con la rama de la restauración, hay que ser muy cuidadoso y es una rama que en Córdoba no está tan explorada…
PB: Sí, hicimos obras de restauración de iglesias en las Concepcionistas sobre la Castro Barros y también en Las Hermanas del Huerto, en San Vicente. Restauramos toda la iglesia que quedó muy linda y es una arquitectura especial. Creo que para ingresar en las comunidades es muy importante la confianza, y a eso lo desarrolló muy bien mi padre e hizo que nosotros tuviéramos una cultura de autocontrol, porque no nos controlaban, teníamos que controlarnos nosotros y de esa forma generar confianza con el cliente.
SH: Eso fue hace muchos años, ¿ahora en qué están enfocados?
PB: Hoy, como empresa constructora, estamos haciendo obras públicas y privadas. Tenemos una obra pública muy importante que empezamos hace 2 meses para la Universidad Nacional de Córdoba que se desarrolla en el Campus Norte, en la variante Juárez Celman. Es una obra muy importante, es la primera de varias obras que van a hacer ahí. Es un campus tecnológico que tiene poco tiempo de ejecución y es muy exigente. Son 10 meses, así que bueno, estamos a todo vapor, y después estamos haciendo una obra para Tubos Trans Electric, es una obra industrial. Estamos haciendo una obra para la Federación de Bomberos Voluntarios allí en Comuna San Roque. Estamos terminando dúplexs para unos inversores en La Calandria, y como desarrollistas, estamos asociados con Meade Inmobiliaria, tenemos varios emprendimientos en curso, quizás el más importante es Mediland en calle Lamarca (en Urca). Ahí estuvimos haciendo la segunda torre, la hemos entregado, y ya estamos haciendo la tercera torre de un complejo de cuatro torres en total, cada torre tiene más o menos 40-42 departamentos con cochera subterránea, apuntando a un público de buen poder adquisitivo.
SH: ¿Qué porcentaje de venta tiene este emprendimiento?
PB: La primera torre está 100% vendida, la segunda torre ya está el 70% y a la tercera torre todavía no la hemos lanzado. Estamos recién haciendo la estructura inicial, así que todavía no está a la venta. Estamos acomodándonos un poco, a ver cómo vislumbra el mercado y después estamos también en desarrollismo haciendo un edificio grande en Paraná esquina Illia, que es un edificio de 15 pisos con 100 departamentos y próximamente vamos a lanzar otro emprendimiento importante que se llama Garderie en lo que eran los terrenos del Vivero Argüello, en Ricardo Rojas. Son también tres torres que ahí vamos a lanzar para un público medio con financiación; estamos haciendo una operatoria para lanzarlo a la venta con financiación de 48, 50 meses.
SH: ¿Y eso cuándo Pablo?
PB: Estamos en las preliminares del proyecto, que ya está aprobado, falta desarrollar un poco más la parte comercial y calculo que en 2 meses se estará lanzando.
SH: ¿Con financiación propia no?
PB: No, va a ser con una financiación institucional a través de estas operatorias nuevas, fondo común de inversión.
SH:¿Con qué agencia?
PB: Dracma
SH: ¡Van a ser el segundo proyecto de Dracma!
PB: Somos el segundo proyecto de Dracma.
SH: Ahí, ¿cuánto tienen que juntar?
PB:Y no sé, pero vamos a lanzar con ellos dos torres, en un proyecto que son cuatro torres.
SH: ¿Cuándo crees que podrían empezar con la piedra fundacional?
PB: Yo calculo que a fin de año, como es institucional tiene que seguir toda una serie de pasos muy rigurosos, hay que pasar todo el presupuesto, tiene que ser todo muy transparente así que estamos en esa etapa en este momento.
SH: ¿Cuál es el secreto para sostenerse tantos años en una industria tan compleja como la construcción, el desarrollismo, donde las reglas del juego cambian permanentemente y hay tantos que quedan en el camino? Sin embargo hace tantos años que están ...
PB: Yo creo que el secreto está en ir avanzando paso a paso, siendo muy precavido en todas las variantes y sorpresas que te da el mercado, generando mucha confianza con el cliente y fundamentalmente haciendo bien las cosas. Eso lo tomamos de mi padre, donde la calidad era un sello en la construcción, siempre responder al cliente y tal es así, que el año pasado certificamos ISO 9.000 y este año vamos a revalidar, así es que estamos convencidos de que nuestra calidad, el servicio y la confiabilidad que podemos dar de nuestros productos y la seriedad, a la larga lleva a tener continuidad en el trabajo.
SH: La última, Pablo... ¿asoma la tercera generación de Pucheta?
PB: Sí; está calentando motores mi hijo, ya está trabajando en la empresa, son sus primeros años, se recibió el año pasado de Administrador de Empresas así que sí, apostamos a la tercera generación sin duda.