La ganadería regenerativa se está difundiendo a lo largo de todos los países productores de alimentos, y El Mate, la empresa familiar de la que es parte Bruno Vasquetto, tiene mucho que ver.
Además de la propia reconversión de la empresa familiar hace unos años, apoyado por la tecnología, las redes sociales y la pandemia, lo impulsó a que más gente -productores de todo el país y países sobre todo de América- se interesaran por la agroecología y especialmente por criar animales respetando los tiempos del animal y el ambiente.
“Es una metodología de hacer ganadería imitando los procesos de la naturaleza, lo que es la ganadería imita el comportamiento de las manadas que antiguamente pastoreaban en grupos compactos, en tiempos cortos, así lo hacían miles de herbívoros, guanacos ciervos, ñandúes, bisontes en diferentes regiones”, cuenta Bruno.
Y agrega: “a través de una herramienta que es el alambre eléctrico, animales domésticos, vacas, búfalos, ovejas, imitan el comportamiento ancestral, se mueven en grupos compactos, grandes, se hacen altas cargas instantáneas para que pastoreen un sector hasta agotar el alimento natural para luego dejar que ese lugar descanse,que el pasto se recupere".
María Rosa Ponce: ¿Cómo surgió la idea de la reconversión ?
Bruno Vasqueto: “Fuimos productores toda la vida, mi padre es es el director de la empresa, mil abuelo fue tambero, en el campo, la explotación de Adelia María se hacía una agricultura intensiva de siembra directa, especialmente de de soja y maíz, nos tocaron dos o tres años malos en rindes y precios, se dio la combinación que nos hizo tambalear financieramente, y buscando alternativas hacia dónde salir y qué podíamos hacer, cómo generar un sistema más resiliente a la sequía a cambios de precios, a las políticas de los Gobiernos de turno, surgió la posibilidad de ir a visitar un campo que ya trabajaba con esta metodología y nos pareció viable aplicarlo a nuestra tierra (empresa) y ahí arrancamos en 2012.
Actualmente el Mate tiene como empresa productora de animales basa su negocio principalmente en la cría y venta de sus novillos pesados criados a pasto, ovinos criados en las mismas condiciones y una producción para el consumo local de huevos y pollos (también en sistema regenerativo), todo en Argentina, en Adelia María.
MRP: ¿Cómo se fue dando la presencia internacional de “El Mate"?
BV: “Es una faceta que fue surgiendo en estos años, asesorar proyectos y capacitar empresas, profesionales e interesados, con la iniciativa que fue creciendo gracias a la tecnología, la carga de material audiovisual creado en el mismo campo fuimos logrando contactos que nos llevaron ya a trece países y a casi todas las provincias argentinas.
Hay una gran demanda, la pandemia la ha impulsado, muchos productores están interesados en aplicar esta metodología”.
Agroecología y producción de alimentos con un sistema amigable con el ambiente (y empático con los animales)
“La ganadería regenerativa se enmarca en una práctica agroecológica, muchos productores, si bien no hace la reconversión completa están aplicando sus principios, ya que rotan cultivos e integran animales en sus lotes”, explica Vasquetto
“Opino que la mejor agricultura va a aliada a una buena ganadería. Es difícil hacer una buena agricultura si no rotamos con pastura y rumiantes cuando miramos a largo plazo. Para nivelar el carbono, y lograr una buena estructura de los suelos, muchos productores están aplicando los principios de la ganadería regenerativa y eso es muy satisfactorio".
MRP: ¿Es difícil la reconversión de una producción tradicional a regenerativa?
BV: No en la metodología ni en las inversiones, si en el cambio de paradigmas y preconceptos que todos aquellos que producen o produjeron de manera convencional ya tienen preestablecido.
Lo verdaderamente difícil es romper los paradigmas que uno trae de la producción tradicional ya que estamos acostumbrados a sistemas que exigen un alto grado de uso de insumos, en uso de mucha tecnología y maquinaria a lo largo de todos los procesos, entender cómo funciona la naturaleza y cómo usarla a nuestro favor es el gran desafío para los que se animan a cambiar.
Por otro lado, todos los cambios generan incomodidades, y reconvertir de un sistema altamente demandante de recursos no naturales a otro que requiere de conocimiento de los tiempos de la naturaleza y su ritmo, no es la excepción, en nuestro caso el escollo más grande fue cambiar la estructura mental que teníamos arraigada”.
MRP: ¿Cuál ha sido la experiencia en el resto de los países que visitaron?
BV: “Argentina es pionera, hay muchos proyectos y empresas desarrollando y haciendo a nivel macro, sin embargo, el nivel de campos donde se aplica es muy bajo si lo vemos en el conjunto de la producción".
"No obstante, si lo vemos por números de casos, viene creciendo exponencialmente en los últimos diez años, en la pandemia creció muchísimo más. Hay un gran futuro para la ganadería regenerativa".
"Hace una década era muy difícil acceder a formación e información, no se podían conocer fácilmente otras experiencias, hoy con internet se ha impulsado el intercambio de experiencias y los resultados son muy alentadores, en casi todos los países hay una base de productores trabajando y otro tanto una base".
MRP: Además de vacunos y ovinos producción de aves en espacios libres, ¿cúal es la experiencia de El Mate en ese sentido?
BV: “Esta es una práctica antigua que fue incorporada por El Mate, hace unos años cuando instalamos los gallineros móviles, los cuales se van moviendo a lugares nuevos entre 4 a 7 días".
"Una gallina parte de comer grano, balanceado, maíz, fuente proteica y minerales, a comer pasto y todo lo que en el vive en él, complementa su dieta con gusanos, lombrices lo que va sacando de la pastura, es un sistema muy interesante para productores chicos o medianos, permite que con una inversión razonable se pueda armar una unidad económica para lo que se precisa de poca superficie, en una hectárea se pueden tener unas mil gallinas, se puede crecer rápido, en escala sin necesitar tanta tierra a disposición”.
MRP: Hablemos de costos...
BV: “La inversión en un lote de gallinas para un productor que tenga que arrancar de cero (módulos, gallinas, redes) con 8 a 10 mil dólares puede arrancar, es una inversión muy razonable para el beneficio que tendrá por delante”.
"En cuánto a la reconversión en cría de animales vacunos por ejemplo se debería hacer la tarea en forma escalonada, no tengo datos de cuanto saldría iniciar de cero porque la inversión en compra de los animales es mucho más importante y depende de los precios del mercado del momento”.