Club Lovvi, en esta oportunidad, tuvo un mano a mano con Iván Schuf, coach financiero, empresario e inversor. Schuf participa activamente en la comunidad de Club Lovvi y en unos de los encuentros de la comunidad Lovvi se animó a dialogar con el Club.
Lovvi: ¿Cómo sabes cuándo invertir en un negocio? ¿En base a qué criterios?
Iván Schuf: Se me ocurren 5 indicadores a tener en cuenta a la hora de emprender o invertir en un negocio:
- Analizar el objetivo: para qué hago lo que hago. Realizó negocio para ganar más dinero o lo hago para tener más libertad, es decir, crear un activo que me genere tener más ingresos pasivos.
- Tener en claro los valores: cuáles son mis valores, cuál es mi relación con el tiempo, quiero trabajar en casa o en otro lugar, qué cantidad de horas, si tengo que viajar. Ejemplo, si quiero acompañar a mi hijo a un partido de rugby y, a la vez, quiero hacer crecer un negocio que me demanda estar lejos de esos momentos, las probabilidades de fracaso aumentan. Los valores y deseos tienen que estar alineados.
- Analizar los riesgos a la hora de invertir: lo ideal es minimizar a cero, o que el riesgo no me lleve a fracasar mi negocio.
- Potencial de ganancias: puede ser limitado o ilimitado. Analizando el producto, capacidad de producción y otros factores claves, tengo que utilizar la innovación y creatividad para maximizar resultados.
- A la hora de emprender, tengo que generar también ingresos pasivos: mi negocio no solo me tiene que generar ingresos. Uno debe buscar no quedar pegado de manera dependiente al negocio, en algún momento uno puede desprenderse y que el negocio siga funcionando. Es decir, crear un activo que me genere un flujo de efectivo sin estar presente.
L: ¿Qué mirada tienes sobre invertir en crecimiento personal como aprendizaje para el desarrollo de los negocios?
I.S: Apoyo el estar actualizado y preparado, porque cuando se presente una oportunidad yo puedo tomarla. Eso significa estar en permanente contacto con nuevos contactos, ampliar mi círculo de relaciones, estar a la vanguardia de lo que está sucediendo en el mundo. El mercado es sabio: si yo no aporto valor, su respuesta va a ser negativa.
El mercado nunca hay un crecimiento lineal, hay momentos de mayor crecimiento que otros, y entender esos ciclos hará que pueda tomar decisiones enfocadas y más asertivas.
L: ¿De qué manera has concretado el hacer negocios con la mirada que propones?
I.S: Siento que esta manera de pensar y hacer, desarrolló en mí la habilidad de hacer negocios con y sin dinero. Teniendo en cuenta los valores, autoconocimiento, mentalidad, análisis de riesgo, etc. puedo reconocer la posibilidad casi inconsciente de generar negocios. Por ejemplo, uno de mis negocios se desprende de una posada en Brasil. Logré darle forma y generar un activo, incluso sin saber el idioma, sin tener un abogado o contador allá, sin saber del rubro, sin tener mentores, y mucho menos capital para invertir. Eso es educación financiera: la capacidad de gestionar recursos diferentes. Uno de los recursos es el dinero, pero cuidado con pensar que es el recurso principal.
L: ¿Qué te parece urgente decirle al nuevo empresario para que comience a prestar atención?
I.S: Todos tenemos el mismo desafío en común, el dinero emitido por cualquier banco central no tiene valor por sí mismo. Sumado a que pierde valor todos los días. Entonces, mi sugerencia sería que desarrollen para transformar las utilidades de la empresa en activos que generen ingresos pasivos, y con ello puedas lograr libertad de tiempo, demográfica y financiera. La clave es desarrollar esa habilidad para dejar de vivir del negocio.. Insisto, es posible desarrollar la habilidad para ser libres, mientras generamos ingresos.