El lanzamiento tuvo lugar en el Espacio BitCoin de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y contó con la presencia de los CEOS de esta fullstak company que explicaron de qué se trata este nuevo token.
GBM es una ecofintech que tiene su génesis en la charla de tres amigos que en 2019 se plantearon una alianza que fusionara activos digitales y la protección del medio ambiente. De esa manera Juan Núñez, Juan Durañona y Vedia y Alejandro Carrano dieron vida a esa célula que hoy se convirtió en un grupo fundacional de cinco personas que además de los mencionados, integran Javier Ortiz de Artiñano, jefe de Negocios de Criptomonedas con base en Estonia y Ricardo Morales Bosch, director para la Operación de Emisión y Comercialización de Bonos de Carbono desde Uruguay. Además el equipo se completa con más de 60 profesionales entre los que se encuentran desde antropólogos hasta especialistas en criptotecnología.
Actualmente GBM tiene 25 mil hectáreas en Misiones y el objetivo es llegar a un millón de hectáreas en 10 países diferentes. Cabe señalar que la compra de las tierras se realiza a través de estudios de prefactibilidad, se trabaja con la comunidad, con organismos públicos y privados y se cuida la biodiversidad.
GBM para su salida al mundo sumó importantes partners que además de sumar confianza en el proyecto, también les propusieron nuevos desafíos a los fundadores. Entre los partners se encuentra Sumsub una compañía con sede en Londres, líder global en soluciones KyC (siglas en inglés de ‘conoce a tu cliente’) para la identificación y verificación remota de los compradores y verificaciones y también MoonPay, empresa de tecnología financiera que crea infraestructura de pagos para cripto y que también provee soluciones de verificación en KyC. Siempre se busca la trazabilidad y evitar el lavado de activo a través de estas operaciones con criptomonedas.
En el lanzamiento público de GBM, Juan Núñez explicó que desde el principio de este proyecto se pensó en una “forma disruptiva de hacer frente al cambio climático”. “Estamos en un camino en el cual al planeta, si no lo remediamos mediante la acción, en el 2030 comienzo el punto de no retorno y entre 50 y 100 años desaparece la vida tal como la conocemos”.
GBM es un token respaldado en la preservación de un metro cuadrado de selva de deforestación y la validación de ese token se realiza a través de un mapa digital, en el cual el usuario designa la cantidad de metros cuadrados que quiere preservar con su compra.
“Este es un proyecto que tiene la capacidad de escalar la remediación del medio ambiente pero además que permita generar un incentivo económico para que justamente la economía se fusione con la tecnología para remediar la naturaleza. Nosotros encontramos que es la única solución posible”, señaló Núñez durante la presentación de GBM.
“Somos una fullstack company, significa que nosotros nos hacemos cargo de detectar las tierras que están siendo degradadas y a través de una estrategia disruptiva logramos que esa acción antrópica se convierta en bonos de carbono que sean accesibles para cualquiera y usamos mucha tecnología en el medio para que el proceso de remediación de la naturaleza sea lo más rápido y eficiente posible”, agregó Núñez. Asimismo agregó que el punto más importante en este proceso es la tecnología web 3, que no es otra cosa que el uso de la blockchain y el uso de la tecnología descentralizada.
Quien adquiere un token de GBM puede tener trazabilidad y también hacer ecobranding, para demostrar que están accionando contra la crisis climática. Pero además tienen acceso a créditos de carbono que emite esa tierra que se cuida. En ese sentido, Núñez explicó que “el mercado de crédito de carbono tiene una demanda insatisfecha de alrededor del 70%”.
GBM cuenta con licencia Estonia, que es la licencia expedida específicamente por la Unidad de Inteligencia Financiera de Estonia que permite a GBM prestar un servicio integral de moneda virtual, cambio de moneda virtual y billetera de moneda virtual.
En ese sentido, Javier Ortiz de Artiñano, uno de los cinco fundadores y además jefe de criptonegocios de GMB, en diálogo con InfoNegocios explicó la importancia de contar con este aval otorgado por el Gobierno de Estonia: “Estonia fue el primer país en desarrollarla en Europa y trabajan para que quienes obtienen la licencia cumplan con los altos estándares que se les exige. Por eso se pasó de casi 2.000 licencias a 1.800 y ahora hay menos de 400 y estar entre esas 400 realmente nos da mucho prestigio”.
Ortiz de Artiñano es español, abogado y especialista en comercio exterior, pero desde 2012 está inmerso en el mundo cripto y actualmente vive en Estonia.
InfoNegocios le consultó qué le atrajo de GBM para involucrarse de esta manera: “Es un proyecto realmente disruptivo, aunque no me gusta mucho utilizar la palabra porque se ha usado demasiado , pero en mi caso que llevo más de 20 años de actividad profesional, esta ha sido la primera vez de un proyecto en el que siento que puedo cambiar el mundo para bien. Suena un poco cursi, pero yo he llegado a ese punto en la vida en que me apetecía hacer algo que podía ser un cambio y desde el principio estoy al cien por cien con el proyecto”.
GBM tiene intenciones de tokenizar hectáreas deforestadas en diez países diferentes. “Empezamos en Misiones, Argentina pero tenemos para hacer prefactibilidad de tierras en Brasil, India, y se va a abrir el mercado de Japón y China”, explicó Cristian Costantini a cargo de la Gestión Comercial Directa de GBM, en diálogo con InfoNegocios.
El token sale a la venta al público a un precio de un dólar y hay paridad entre el token que se compra y las hectáreas reforestadas o protegidas que validan ese token.
“Hay un análisis del equipo de finanzas para que no haya tanta fluctuación de la moneda, está todo para que no sea una moneda especulativa. Buscamos que la gente tenga este activo de resguardo”, explicó Costantini.
“Cuando alisten las monedas, se va apoder descargar en cualquier exchange del mundo, vamos a estar dentro de las cinco exchange más importantes del mundo”, agregó.
Asimismo agregó que quienes compraron los token en la venta semilla (los primeros inversores que se jugaron por GBM) “adquirieron la moneda en precio preferencial, mucho más barato que lo que hoy se está poniendo a la venta y lógicamente esa gente esperó todo este tiempo en que nos pudimos encontrar con fondos y empresas que nos acompañan”, agregó.
“Nos apoyaron y creyeron, y ahora cuando salga la moneda y se comercialice van a poder venderla tranquilamente”, dijo Costantini.
Cómo comprar los token de GBM
Para adquirir estos activos digitales hay que crear un usuario y contraseña en la página de GBM a partir de allí ya puede adquirir a un dólar esta criptomoneda made in Argentina. En poco menos de dos meses estará lista la app para operar desde el teléfono. Actualmente cuenta con 1500 usuarios poseedores de la cripto verde.
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