Acompañando el programa para producir la Nissan Frontier desde finales de 2018, la empresa miembro de la alianza con Renault avanza en las obras de la sede administrativa en el predio de Santa Isabel donde un equipo de 150 personas supervisarán y ejecutarán el proyecto industrial.
El proyecto se basa en un espacio abierto rodeado por una “doble piel” que actúa como protección climática y acústica, generando así una mayor eficiencia en el consumo de recursos. Interiormente la organización es abierta con un corte espacial generado por un patio central que se vincula a la recepción y el ingreso, produciendo un intercambio visual entre interior y exterior.
El programa de Nissan es producir pick-ups en Córdoba a partir de una inversión de US$ 600 millones y un objetivo de 70.000 unidades anuales.
La producción de pick-ups en Córdoba se integra a una red de manufactura global y complementa a la que produce autos y crossovers en Brasil.
“Nos enorgullece saber que el ambicioso proyecto sigue avanzando a toda velocidad. Argentina juega un papel clave en los planes de crecimiento de Nissan en América Latina”, resume Diego Vignati, Director General de Nissan Argentina.
El inicio de producción de las pick-ups está previsto para el segundo semestre del año próximo. Actualmente participan del proyecto, junto al equipo argentino, profesionales de Japón, Brasil, México, España, Venezuela y Holanda, quienes son responsables por brindar su experiencia y conocimiento, asegurando que el complejo industrial de Córdoba siga los estrictos estándares globales de calidad de Nissan.
Así quedarán las oficinas de Nissan en la planta de Santa Isabel (camino a la producción de la Frontier en 2018)
Nissan presentó el diseño de las nuevas oficinas desde donde serán administradas sus operaciones en la planta de Córdoba. Con un diseño innovador y moderno, en línea con los estándares de marca globales, las nuevas oficinas estarán listas en las próximas semanas.