Es un negocio innovador, con reglas que la diferencian de cualquier feria o showroom temporal y con foco en la economía circular. Su clave es la estructura de límites inamovibles que le dan seguridad a sus clientes y proveedores con un seguimiento exhaustivo de cada prenda, brindándole la seriedad que permitió su expansión en toda la ciudad.
Conversamos con Laura Posada para conocer detalles de su negocio y sus planes para este año.
IN: Laura, ¿cómo es el negocio? ¿Cómo te stockeas?
Laura Posada: Básicamente lo que hacemos es recibir ropa de la estación actual “pre amada”, una frase ya registrada por la marca. Es decir, ropa que ha sido amada y que ya se ha dejado de usar. Nosotras la seleccionamos en el momento, la devolvemos si hay prendas que consideramos no están aptas para la venta y nos comprometemos a enviarle el detalle de sus prendas en un lapso de 15 días.
IN: ¿Cómo sigue la relación con tus proveedores?
LP: Enviamos un excel detallado por whatsapp con el precio de sus prendas junto a un contrato de 4 meses donde le explicamos todo el proceso que tendrán. En ese momento las mismas comienzan a estar colgadas en exposición, son 3 meses donde las prendas permanecen en su precio inicial, luego el último mes si aún no se venden pasan a estar en liquidación (mitad de precio) y en el caso de no venderse el proveedor tiene dos opciones, estar de acuerdo con donarlas a entidades benéficas o pasar a retirarlas por el local. En el transcurso de esos 4 meses el proveedor recibe información sobre sus ventas, comisión y día de cobro.
IN: ¿Esto tiene que ver con el concepto “empresa de triple impacto” de la página web?
LP: Sí, tiene un impacto ambiental porque ayudamos a que se reduzca la fabricación de indumentaria, siendo la segunda industria que más contamina el ambiente. Nuestra marca le da una segunda y hasta tercera oportunidad a las prendas. La segunda es económica porque cada proveedor que nos trae prendas recibe todos los meses un pequeño ingreso y el tercer impacto es solidario porque al final de todo el proceso, las prendas que no se venden, se donan a entidades benéficas.
IN: ¿Crees que es un momento propicio para este tipo de negocios?
LP: Nuestra cabeza está cambiando, la sustentabilidad está marcando tendencia a la hora de consumir. Si yo te digo que para fabricar un jeans se necesitan 7.500 litros de agua y que esa cantidad de agua es la que utiliza una persona en 7 años seguramente le vas a dar mucho valor a nuestras prendas por todo lo que significan.
IN: ¿Dónde está tu ganancia?
LP: En este momento está en los locales que fuimos inaugurando el año pasado que fueron tres: todo lo que se ganó se volvió a invertir. Ahora mi proyecto es abrir en Barrio General Paz, estoy buscando el local que cumpla con los requisitos que necesitamos. A la vez, estoy invirtiendo en un sistema de fidelización del cliente para nuestra tienda web, donde el cliente pueda ver cuál es el impacto ambiental que está provocando su compra en el momento. Por ejemplo al comprar un pantalón y una remera ahorrás tantos litros de agua, entonces vas a sumar puntos que después vas a poder canjear por descuentos en la tienda.
IN: Entonces, ¿es rentable?
LP: Sí, es un negocio rentable, fácil de manejar por ejemplo, nuestra franquicia de San Luis está buscando un local más grande para mudarse y por supuesto ya recuperó su inversión.
IN: ¿Cuántas prendas se venden por mes en un local?
LP: Para abrir una sucursal nosotros necesitamos tres mil prendas, y se venden aproximadamente dos mil prendas por mes en cada sucursal, estos son números de febrero que seguramente ahora en marzo sean mayores.
IN: ¿Cuál es el ticket promedio de Laura Posada Estilo?
LP: Es de $ 2.500. Obviamente en invierno sube un poco más, todas las sucursales superan el millón por mes en venta.
IN: Si quiero tener mi franquicia ¿cuánto dinero necesito?
LP: Nosotros no abastecemos de mercadería, la ropa la buscan en cada zona, esto básicamente es un beneficio para el franquiciado entonces allí se reduce muchísimo la inversión, que es de quince mil dólares. Nosotros nos encargamos de enseñar todo el proceso, acompañar en la elección del local y personal, entregar el mobiliario, computadoras, manuales etc.
IN: ¿Cómo logra cada local abastecerse antes de abrir?
LP: Un mes antes de abrir al público, se reciben las prendas en el local, anunciando su apertura por redes.
IN: ¿Y la tienda virtual?
LP: Es una sucursal más, nuestra tienda virtual tiene vida propia, las clientas compran con un link de pago y luego les llega el pedido a su casa en cualquier parte del país.
IN: ¿En qué otro lugar querés una franquicia?
LP: Mi proyecto es tener 5 sucursales, y abrir 3 franquicias por año. Me gustaría Jesús María, Río Cuarto, Carlos Paz… Y soñar, sueño con tener un centro de distribución de ropa y vender en todo el país de manera online.