El campo y la tecnología se unen cada vez más. A las alternativas de inversión que ya existen se les sumó hace menos de un año lo que podríamos considerar un híbrido.
"Siempre estuvimos canalizando inversiones de gente que no es del sector pero que le gusta, confía y cree que es uno de los motores de la economía”, comenta a este medio Guillermo Villagra, uno de los creadores de BitCow.
Por eso, luego de analizar e investigar varias alternativas desarrollaron este token digital que está respaldado en un activo real que se va reproduciendo con el tiempo: vacas. Ergo, quien decide apostar a BitCow, adquiere un porcentaje de un rodeo que en este momento tiene 1.800 vacas (que se están reproduciendo) en un campo en Buenos Aires (y pertenece a los mismo dueños de Openbit).
Quien adquiere un BitCow tiene un respaldo de 1,2 vacas. Ahora, su valor está relacionado al valor de dos vacas en el mercado. Hoy es de $ 120.000 (en noviembre de 2019, cuando se lanzó, valía $ 90.000).
“Si vos compraste un BitCow, esa vaca al tener crias, te da un pedacito más de un BitCow. Nosotros nos manejamos con equivalencias, pero vas sumando y ese BitCow tiene un valor en el mercado que no necesariamente está ligado a la vaca, el BitCow puede valer $ 150.000 y la vaca puede costar $ 50.000 o $ 60.000. Ahí dependerá de la oferta y demanda, y de la confianza que genera el producto para que la gente lo quiera comprar. Además qué pasos vamos dando nosotros como empresa”, explica Villagra.
Asimismo, la propuesta tiene otro costado interesante que es que también funciona como una opción de crowdfunding para productores.
"Nosotros a futuro queremos que sea mucho más que la suma de la vaca y sus cosas, queremos que sea una moneda. Que el productor agropecuario pueda pagar sus gastos, llenar el tanque del tractor o comprarse un tractor”, anticipa uno de sus creadores.