AGUSTIN SZAFRANKO
El esperado acuerdo de Argentina con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por un nuevo programa de financiamiento "es poco probable" que se firme antes de octubre, mes de las elecciones legislativas, según el Wall Street Journal.
De ser así, la rúbrica se demoraría seis meses más que el plazo "deseable" que se había puesto en el Gobierno en el tramo final de 2020: la intención era cerrar en marzo o abril para despejar incertidumbre sobre el rumbo macroeconómico y además cumplir el requisito que exige el Club de París para reprogramar el vencimiento de u$s 2400 millones que opera en mayo.
"No se llegó al escenario en el que se vea que el acuerdo vaya a firmarse en pocos meses, los progresos han sido pequeños", señaló una fuente citada por el medio financiero, que agrega hasta ahora no "ha habido discusiones sustanciales" sobre cómo Argentina planea frenar el gasto público desbocado".
Desde el Gobierno ante la consulta de El Cronista no hicieron comentarios. Atravesar el período preelectoral sin un acuerdo con el Fondo liberaría al Ejecutivo de tomar medidas consideradas impopulares con miras a achicar más el déficit fiscal en un contexto de crisis económica, pero al mismo tiempo implicaría severos riesgos que desaten una mayor inestabilidad financiera.
Es que el Ejecutivo había manifestado su intención de que el acuerdo se sellara antes de mayo y en cierta medida las expectativas se habían alineado en consecuencia, por lo que algunos analistas consideran que una eventual postergación elevaría el riesgo país, bajaría el valor de los bonos y sumaría tensiones cambiarias sobre la brecha. No obstante, en las últimas jornadas creció el escepticismo.
"Si bien se venía especulando hace unas semanas, que confirmen que el acuerdo estará en octubre sería muy malo. Apuestan a que con la soja a u$s 500 por tonelada les alcanza para patearlo. Y el mercado estaba con alguna expectativa. Ahora se viene el vencimiento con el Club de París, seguramente vayan a un atraso y se genere más ruido", explicó Fernando Marull, economista de FMyA.
Por su parte, Esteban Domecq, de Invecq, opinó que un acuerdo más tardío no sería disruptivo para las expectativas, al afirmar que semana a semana caen las posibilidades de que se firme en mayo, y sostuvo que el contexto internacional le permite al Gobierno dilatar el acuerdo si considera le juega en contra para las elecciones.
"El frente externo sumamente favorable, con commodities agropecuarias en récord de ocho años, flujos de capitales moviendose hacia economías emergentes y monedas de la región apreciándose, de alguna manera blinda el escenario de recuperación económica", argumentó.
Pero cerrar el acuerdo en octubre implicaría la imposibilidad de sentarse a renegociar el vencimiento remanente de más de u$s 2400 millones que se le debe pagar al Club de París en mayo, dado que el grupo acreedor requiere un programa del Fondo para un seguimiento de las variables macroeconómicas.
Como Argentina no tiene fondos para afrontar este pago, caería en default con el Club de París, otro aspecto que suscita preocupación, teniendo en cuenta que es una deuda con los estados, ya no con acreedores privados que puedan despertar apoyos de la comunidad internacional.
"No creo que el acuerdo con el FMI se dilate tanto, hasta octubre, creo que es parte de la estrategia de negociación del Gobierno. No hay quitas, hay pagos para hacer, es otro tipo de negociación y en el segundo semestre vence una cifra que supera al total de las reservas netas actuales", señaló Matías Rajnerman, de Ecolatina.
El vencimiento es el 30 de mayo y Argentina tiene un plazo de 60 días para cumplir el pago, por lo que en términos prácticos tiene hasta el 30 de julio.
No obstante, los especialistas no descartan que las autoridades busquen mostrar algún documento que certifique que las negociaciones con el Fondo "están encaminadas" y que les permita renegociar, dado que varios de los países del grupo acreedor son miembros relevantes del organismo. De todas maneras, el poder de negociación de Argentina es distinto en cada caso, dado el peso que tiene la deuda en la cartera de cada multilateral.
"Los miembros del Club de Paris están tambien en el FMI, supongo que podrá plantearse una estrategia de postergación del acuerdo supeditado al arreglo de la deuda con el Fondo. Creo que el Gobierno se va a mover por ahí. De todas maneras no espero que se resuelva en los 60 días de gracia: o se resuelve todo ahora antes de mayo, o se posterga para octubre/noviembre", pronosticó Domecq.
Respecto a la deuda con el Fondo, hay dos vencimientos de cerca de u$s 300 millones cada uno en mayo y en agosto que el Gobierno ya tenía previsto pagar con fondos prestados de otros multilaterales. En septiembre ya opera una obligación de principal por u$s 1868 millones, pero sin la posibilidad de estirar el plazo, a diferencia de la deuda con el Club de París.
En la conferencia de prensa matinal de los jueves, el vocero del FMI, Gerry Rice, señaló que "las discusiones continúan siendo muy activas y constructivas mientras las autoridades argentinas trabajan para diseñar su plan económico". También indicó que "no hay plazos para el acuerdo" y que el ministro de Economía, Martín Guzmán, viajará a mediados de marzo a Washington D.C.