Tiendas más amplias y mejor iluminadas, apuesta a los productos frescos y un perfil distinto de franquiciados. La cadena de supermercados low cost DIA está cambiando su imagen en la Argentina, con el objetivo de mejorar el servicio y la atención de sus consumidores.
La compañía había inició el año pasado en España un proceso para reformular su modelo de negocio. Tras varios años de balances en rojo y, luego de que el fondo LetterOne se quedara con la mayoría accionaria, la cadena decidió unificar su oferta comercial y hacer foco en los formatos más rentables.
"Hoy presentamos un nuevo modelo comercial de las tiendas. Lo que buscamos es un cambio estructural y no solo de imagen. Por un lado, habrá renovación de fachadas, pero también en los equipamientos y en el surtido de productos. Es un plan que recién está comenzando y va a seguir con fuerza en 2021", explicó Rodrigo Gargaglione, director de Franquicias y Experiencia del Cliente de DIA Argentina.
Además, la compañía buscará potenciar la categoría de productos frescos, para que se conviertan en uno de los caballitos de batalla de la marca. Para eso, decidió cambiar la ubicación del sector a la entrada de los locales y a
Con este cambio las tiendas tendrán pasillos más amplios y mejor iluminados. Así se busca, mejorar el perfil de los locales y fortalecer la relación de la marca con los clientes.
"DIA no es lo que era hace 20 años cuando llegó a la Argentina, el mercado cambió y el contexto nos invita a cambiar. Sin embargo, queremos seguir siendo el supermercado de proximidad que ofrece precios bajos. Por eso, la idea es mejorar la propuesta sin perder los pilares", dijo Gargaglione y agregó que en las tiendas en las que ya se implementaron los cambios –tres propias y una de un franquiciado– hubo una mejora en los niveles de rentabilidad.
En 2019, la filial argentina de DIA tuvo una caída en sus ventas del 45,2% a raíz, en gran medida, de la devaluación posterior a las PASO. En los primeros meses de este año, en tanto, las ventas netas aumentaron con fuerza, gracias a la mejora de los resultados operativos y a pesar de una devaluación del 35% del peso.
Además, la cadena decidió cambiar el perfil de inversor para sus franquicias. Hasta el momento, DIA apuntaba emprendedores, mayormente familias, que estuvieran muy cerca de la operación. A partir de ahora, en cambio, buscarán personas que puedan tener varias tiendas operativas y con un fee de ingreso mayor, que rondará los $ 300.000.
El cambio se da luego de un año en el que la marca tuvo que dar de baja una gran cantidad de franquicias. De 681 que tenía operando en el país a fines de 2018 pasó a 611 en diciembre de 2019, 40 cerraron y 30 empezaron a ser administradas por la compañía. En los primeros nueve meses de este año, en tanto, el número creció a 614.
"Queremos dar un paso de valor, con inversores que tengan otro tipo de negocios y que no sean solo operadores de una tienda. Aunque también estará abierta la opción para los quieran estar al frente del punto de venta, vamos a ser más rigurosos en la selección", agregó el ejecutivo.
Más inversión
Además del fee de ingreso, se pedirá una garantía hipotecaria y una inversión inicial de hasta $ 2 millones. Con ese dinero se mejorará la presentación de las tiendas Buscan mejorar la presentación de las tiendas y que los franquiciados puedan replicar el know how de la compañía.
Con los franquiciados actuales iniciarán un plan de trabajo de formación, que les permita reconvertirse y que puedan acercarse al nuevo perfil. Están gestionando, además, planes con entidades financieras para que puedan acceder a créditos.
En lo que resta del año, la compañía espera abrir tres nuevas tiendas con el sistema de franquicias. Para 2021 el número podría llegar a las 30.
"Hay una definición de crecer a partir de las franquicias. Ese es camino", concluyó Gargaglione.