El Ministerio de Economía ofrecerá en agosto, septiembre y noviembre tres bonos en dólares bajo ley local por hasta u$s 500 millones en cada ocasión (un total de u$s 1500 millones) para atraer a inversores extranjeros que apostaron a instrumentos en pesos en los últimos años.
El Gobierno busca evitar que se desencadenen temblores en el frente cambiario y financiero, dado que la demanda "natural" de estos fondos es en dólares y no en pesos, moneda que utilizan para hacer ganancias de corto plazo.
En otras palabras, el objetivo oficial es alejar el riesgo de un rápido desarme de posiciones en moneda local que presionen las cotizaciones paralelas del dólar y fuercen una devaluación del tipo de cambio.
La idea de la Secretaría de Finanzas, a cargo de Diego Bastourre y Ramiro Tosi, es que fondos como PIMCO, que es el principal tenedor del Botapo (TJ20) que vence la semana próxima, puedan demandar estos títulos y faciliten el financiamiento del Tesoro en pesos mediante la confianza de los acreedores argentinos.
Como contó El Cronista, este mes Economía afrontaba vencimientos de deuda en moneda local por $ 340.000 millones.
La semana que viene vencen unos $ 130.000 millones del Botapo (TJ20). Este miércoles se anunciará la licitación de instrumentos para refinanciarlo el jueves 18.
Lo que no se logre refinanciar, se pagará la semana que viene, garantizó el secretario de Finanzas de la Nación, Diego Bastourre.
La intención oficial continúa siendo la misma desde diciembre del año pasado: apostar a reconstruir la curva en pesos y normalizar el mercado.
Si el roll over del Botapo no se pudiera lograr en su totalidad, el Tesoro cuenta con un "colchón" o exceso de financiamiento de $ 80.000 millones, que fue el superávit que consiguió con las licitaciones de deuda en pesos entre mayo y la primera quincena de junio.
"Es un vencimiento grande el de la semana que viene. Está el Botapo y otras letras, pero confiamos en poder renovarlo en un gran porcentaje", comentó Bastourre.
Según los datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), la semana que viene vencen $ 129.505 millones entre capital e intereses del Botapo, $ 28.087 millones de una Letra del Tesoro en pesos a tasa Badlar Privada (Lebad), $ 2531 millones de un Bono de la Nación Argentina (Bonar) y $ 53.995 millones de una Letra colocada al Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).
En conjunto, suman $ 214.118 millones los vencimientos para la próxima semana, la más complicada del calendario de deuda en moneda local.
Las licitaciones de los bonos en dólares, en tanto, serán el 7 de agosto, el 25 de septiembre y el 27 de noviembre.
El plazo de amortización no está confirmado: antes de la primera licitación en agosto, el Gobierno espera haber cerrado el proceso de reestructuración de la deuda externa y promete igual tratamiento a los tenedores de instrumentos en dólares bajo ley local.
Es decir, que si se abre un período de gracia por dos o tres años para los bonistas con ley de Nueva York, también ocurrirá lo mismo con los acreedores de títulos con ley de Buenos Aires.
El mecanismo será con una subasta: quienes ofrezcan más pesos obtendrán esos bonos nuevos que se emitirán en el segundo semestre de 2020, la primera en dólares que hará el Gobierno en esta etapa.
Los títulos locales en dólares habían sido "reperfilados" hasta el 31 de diciembre, mientras se lleva a cabo el canje de los bonos con ley extranjera.
En abril, el ministro de Economía, Martín Guzmán, firmó junto al presidente, Alberto Fernández, el Decreto 346/2020, para postergar al menos hasta 2021 el pago de unos u$s 8400 millones.