El uso indebido de datos de usuarios de Facebook para la campaña política de Donald Trump, en 2016, puso en jaque a la red social, que ayer registró una caída de 6,7% en el valor de sus acciones (Más información, en el suplemento F&M).
Dos artículos simultáneamente publicados por The New York Times y The British Observer revelaron el fin de semana que se filtraron datos de unas 50 millones de cuentas de Facebook, utilizados por la empresa Cambridge Analytica para diseñar anuncios políticos a medida de cada usuario, para apoyar la campaña presidencial de Donald Trump en Estados Unidos. Cambridge Analytica se especializa en obtener y analizar de datos sociales y psicológicos para categorizar a cada una de las personas analizadas para clientes comerciales y políticos.
Entre sus clientes, precisamente, figuran la campaña presidencial de Donald Trump y la campaña por el voto británico a favor de salir de la Unión Europea (UE).
La información se conoció por la confesión de Christopher Wylie, un canadiense que trabajó en Cambridge Analytica desde su fundación, en 2013.
El problema no es menor para Facebook, cuyas acciones se derrumbaron ayer 6,7% ayer en el Nasdaq, tras una baja máxima de 8,15%, al mediodía. La caída destruyó así cerca de u$s 36.000 millones en valor de mercado de Facebook, sobre los u$s 538.000 millones que registraba al cierre del viernes pasado.
Los inversores están preocupados que se impulse una nueva legislación que perjudique el rentable negocio de publicidad de la red social, informó Reuters.
Cambridge Analytica compró los datos a Aleksandr Kogan, un académico ruso de la Universidad de Cambridge que había obtenido el permiso de Facebook para realizar un análisis exhaustivo de personalidad de los usuarios que contestaran un breve cuestionario, con fines académicos. A cambio de recibir una pequeña cantidad de dinero, los usuarios debían aceptar entregar los datos de sus cuentas de la red social, a través de un click. Kogan recopiló, de ese modo, la información privada de 270.000 personas, cifra que trepó luego a 50 millones, sobre todo de EE.UU. y Reino Unido, al incluir datos de los "amigos" de las cuentas analizadas. Pero según expertos en seguridad, el número podría ser incluso mayor.
Ese estudio se había iniciado en 2014, cuando Facebook permitía que si el usuario aceptaba, se pudieran enviar también datos de sus "amigos", si ellos tenían sus ajustes de privacidad "por defecto" al registrarse en la red. En 2015 la red cambió esos permisos y los usuarios ya no pueden enviar datos de sus contactos a aplicaciones externas.
Cambridge Analytica pagó u$s 800.000 a Kogan por los datos del estudio, pero éste nunca informó a Facebook que vendió la información a otra empresa para ser usados con fines no académicos.
En 2015, la red social supo que Kogan había vendido los datos a Cambridge Analytica y pidió borrar la información recabada.
En un comunicado, Facebook informó ayer que había contratado a una empresa de auditorías forenses, Stroz Friedberg, para realizar una auditoría integral de Cambridge Analytica, y que esa consultora había aceptado dar a la empresa el acceso completo a sus servidores y sistemas. También le pidió Christopher Wylie y Aleksandr Kogan someterse a una auditoría y, según Facebook, Kogan dio su consentimiento verbal para hacerlo, mientras que Wylie lo rechazó.
Según Facebook, tanto Cambridge Analytica, SCL, Wylie y Kogan le certificaron que la información había sido destruida. "Si estos datos aún existen, sería una grave violación de las políticas de Facebook y una violación inaceptable de la confianza y los compromisos que estos grupos hicieron", destacó la empresa.
"Seguimos comprometidos con la aplicación vigorosa de nuestras políticas para proteger la información de las personas. También queremos dejar en claro que hoy, cuando los desarrolladores crean aplicaciones que solicitan cierta información a las personas, llevamos a cabo una sólida revisión para identificar posibles violaciones de políticas y para evaluar si la aplicación tiene un uso legítimo de los datos. En realidad, rechazamos un número significativo de aplicaciones a través de este proceso. A la aplicación de Kogan no se le permitiría acceder hoy a los datos de amigos detallados", aclaró Facebook.
Mientras la red social se enfrentaba a nuevas exigencias de información de parte del Congreso estadounidense, el jefe del Parlamento Europeo dijo ayer que los legisladores de la UE investigarán si hubo un uso indebido de datos y agregando que la denuncia implicaba una violación inaceptable de los derechos de privacidad de los ciudadanos, informó Reuters.