Sin convocatoria a empresas de consumo masivo para acordar precios oficializada hasta el momento, el Gobierno apelará a un cóctel ortodoxo para intentar contener la inflación en momentos en que el Índice de Precios al Consumidor toca máximos desde 2002 y apunta a tocar en agosto, otra vez, números cercanos al 6% mensual.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) dio a conocer que el IPC de julio tocó 7,4% y fue la medición mensual más alta en veinte años. La variación interanual llegó a 71%, con un acumulado del 46,2% en lo que va de 2022.
Según el Instituto Estadístico de los Trabajadores de la UMET, el rubro con mayores subas fue el de Equipamiento y mantenimiento del Hogar (11,9%) con incrementos de hasta 31% en electrodomésticos y muebles, asociados a la disparada del dólar paralelo. El Indec lo ratificó en el top tres, junto con los asociados al turismo y el esparcimiento.
El dato contrasta con la desaceleración de la inflación global. Brasil registró deflación en la última medición mensual y Estados Unidos celebró un 0% de suba mensual y una desaceleración en el dato anual.
El salto deja un piso alto para agosto. Según Analytica, el mes arranca con un piso del 5,6%. Eco Go y Ecolatina estimaron 6%. La consultora LCG midió un avance en los alimentos y bebidas del 2,1% en la primera semana de agosto y una inflación de cuatro semanas del 7 por ciento. "Seis de diez categorías presentan variaciones mensuales por encima del 7% en las últimas cuatro semanas", detalló. El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central llevó hasta 90,2% la inflación anual esperada por los consultores.
Cóctel ortodoxo
Sin plan de estabilización a la vista, la política económica del ministro Sergio Massa se orienta a dar señales ortodoxas para contener los precios y resistir una devaluación. Esta tarde, el Banco Central definió una fuerte suba en la tasa de interés.
Fue otro sacudón, después de los 800 puntos básicos de aumento en el día previo a la confirmación del exdiputado como jefe del Palacio de Hacienda. La suba se definió en 950 puntos básicos. La tasa acumula hasta 1750 puntos de incremento en 15 días, luego de haber permanecido sin cambios una vez conocida la inflación de junio.
La suba de tasas se suma a la decisión de frenar el financiamiento monetario del déficit mediante adelantos transitorios, que comenzó a efectivizarse este lunes con la devolución desde el Tesoro hacia el Banco Central de $ 10.000 millones.
Cuentas públicas
Mientras se prepara el recorte en los subsidios energéticos, Massa les hizo saber a los ministerios que no habrá ampliaciones presupuestarias más allá del decreto que actualizó el Presupuesto, a mitad de año. Con la aceleración inflacionaria, será un ajuste de hecho en el gasto público.
La consultora Eco Go, de Marina Dal Poggetto, indicó que, de mantenerse el ritmo de ingresos y gastos del primer semestre, el déficit sería del 3,5%. Y que, para cumplir con la meta del 2,5% acordada con el Fondo, hará falta una contracción del gasto de 10,2% en términos reales -descontada la inflación. La Secretaría de Hacienda de Raúl Rigo manejaba números similares.
El martes, el presidente Alberto Fernández adelantó una convocatoria a cámaras empresarias y gremios para definir acuerdos de precios y salarios para los próximos sesenta días. Hasta este viernes, la Unión Industrial Argentina (UIA) no había recibido ninguna invitación. El único encuentro previsto es el del Consejo del Salario, que se corrió del 18 al 22 de agosto.
Convocatoria lenta
El secretario de Comercio, Matías Tombolini, dilata la convocatoria a empresas de consumo para definir el nuevo rumbo de Precios Cuidados. Tuvo una reunión informal con el supermercadismo, en la que anticipó que quiere volver al "modelo 2015" del programa, con menos productos pero con precios que sean referencia. Su área concentra, ahora, los acuerdos de precios y los permisos de importación. Fuentes del sector privado contaron que se busca fecha para un almuerzo entre el funcionario y la cúpula de la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios (Copal), que preside Daniel Funes de Rioja.
Tombolini adelantó que habrá acuerdos voluntarios y desestimó inspecciones masivas. Pero el martes advirtió: "No los vamos a perseguir, van a venir a sentarse solos. Porque les vamos a tocar la fibra que más les duele: el bolsillo. Vamos a generar las alternativas que necesitamos para que los precios sean justos".
Este jueves, conocido el dato de inflación el secretario adelantó una convocatoria al supermercadismo y a frigoríficos.