La semana pasada, la empresa Organic Latin America envió 72 toneladas de arroz orgánico a Japón, el cual llegará en abril. Es la primera vez en la historia que Argentina exporta este producto al país asiático.
Organic Latin America es el resultado de una alianza global de empresas que producen alimentos orgánicos. Está formada por firmas de Nueva Zelanda, Dinamarca, Tailandia y Argentina.
Este negocio, en particular, les demandó dos años de trabajo. Se fue adaptando el producto y se pasó por auditorias e inspecciones. Para ingresar al mercado, ganaron una licitación del gobierno de Japón y obtuvieron una cuota para arroz tipo grano corto para ser utilizado en la industria.
El arroz es el cereal básico de la cocina japonesa y se encuentra muy regulado por su gobierno. En el medio de las negociaciones entre privados, está el estado japonés, que administra las cuotas de importación. “Japón compra arroz orgánico a Australia, Estados Unidos y China. Ahora, quieren remplazar el producto chino por el nuestro”, dice Christian Martinez, presidente en Organic Latin America y director en Silchron.
Martinez asegura que la expectativa a futuro es aumentar los volúmenes exportados y sumar productos como legumbres orgánicas. Agrega: “las nuevas licitaciones abren en septiembre. La intención es preparar todo para agosto y estar listos para triplicar la cantidad de arroz exportado”.
“El Ministerio de producción nos ayudó durante el proceso con la parte legal. Nos informaron sobre la factibilidad de concretar la exportación. No sabíamos si era viable porque no había antecedentes”, relata Martinez.
El traslado de arroz lleva 50 días. Martinez irá en abril a Japón para recibir los contenedores y verificar que todo llegue en condiciones. El arroz se envío en bolsas con atmósfera modificada.
“Tuvimos frenado seis meses el arroz. Todo el proceso es complicado porque es dinero parado en stock. Durante ese tiempo, vinieron desde Japón a hacer los análisis y muestras necesarias para verificar la calidad”, detalla el presidente de Organic Latin America.
Según Martinez, el beneficio de elaborar productos orgánicos es que permite ingresar a destinos, donde el producto convencional no tiene posibilidad de entrar. Enfatiza: “Por esta venta recibimos mas de u$s 100.000”.
En relación a la competencia local, Martinez sugiere que seguramente pronto habrá otra empresa argentina que exporte al mercado japones. “Allá se manejan con el sistema de trader. Al poco tiempo que acordar con kanematsu apareció otra empresa japonesa que nos quiso comprar. Como le dimos nuestra palabra al cliente, supongo que otra empresa local pronto los abastecerá. En Argentina, tenemos muy buena reputación por nuestros productos orgánicos”, explica.
Se calcula que producir arroz orgánico cuesta entre un 20% y un 30% más que el convencional. Además, Martinez explica que el costo en logística es 100% superior porque se necesita un almacenamiento especial que garantice la ausencia de insecticidas o químicos. Por último, cada análisis realizado costó 500 euros.
En Organic Latin America se producen 500 toneladas mensuales. Hace años, ya venían exportando a Estados Unidos y Canadá, los mercados más fuertes. También vendieron arroz a Holanda, Dinamarca, Alemania, Italia, Nueva Zelanda, Australia, Bolivia y están negociando con Inglaterra, pero todavía no se concretó la venta.
“También, vendemos en el mercado local. En tres años pasamos de vender una tonelada a cien. Vemos que la gente tiene más conciencia sobre la alimentación”, señala Martinez. Actualmente, el producto suele encontrarse en dietéticas o se vende a restaurantes.