Con dos programas en marcha en este sentido, como Precios Cuidados y Precios Máximos, los empresarios del sector sostienen que entienden la necesidad oficial, pero al mismo tiempo advierten que la situación de sus propias firmas se ve afectada.
Los industriales afirman que, para lograr recuperar lo que no pudieron mover sus precios desde marzo pasado, hoy se debería dar incrementos de entre 25% y 30%, un deseo que el Gobierno en este momento no está dispuesto a cumplir bajo ningún punto de vista.
Pero incluso con dos corset de precios ya en vigencia, el costo de los alimentos continúa siendo un problema difícil de manejar.
Según los últimos datos que dio a conocer el Indec, en agosto pasado la inflación anual se posicionó en 2,7%, una cifra por encima de la que se venía registrando durante los meses pasado.
Y en este contexto la categoría "Alimentos y Bebidas no Alcohólicas" fue la que más impactó a la cifra de agosto, con una suba de 3,5%, al igual que segmentos como "Equipamiento y Mantenimiento del Hogar", algo que no había ocurrido entre mayo y julio.
Incluso, el golpe que significa el movimiento de los precios de los alimentos toma mayor dimensión si se toma en cuenta que entre esos cuatro meses el costo de los alimentos estuvo entre 0,5 y 1 punto porcentual por debajo de la inflación general, mientras que ahora está 0,8 puntos porcentuales por encima.
De este modo, el repunte de agosto permitió que la inflación acumulada en lo que va del año en esta categoría llegara a 22,9%, 4 puntos por encima de la inflación general, donde se observa un alza de 18,9% en los primeros 8 meses del año.
También de acuerdo con las cifras que difundió el Indec en los últimos días, las subas generaron que el 55,6% de los supermercados observara en agosto último una disminución en sus ventas, por encima del 51,6% de julio.
Una tendencia similar se dio en el caso de los autoservicios mayoristas. En este caso nada menos que el 62,5% de las firmas sostuvo que sus ventas empeoraron, una diferencia muy importante respecto del 50% de la medición de julio.
Desde ya, en estos casos no se puede culpar solo a los registros del sector alimenticio, aunque sí cabe destacar que tienen una incidencia muy importante en las ventas totales de estas superficies de venta.