SANTIAGO SPALTRO
La Secretaría de Energía eliminará a partir del lunes 1 de marzo un subsidio a la electricidad de grandes industrias y comercios de todo el país.
Más precisamente, era un beneficio en el costo mayorista de la energía eléctrica de unos 2900 Grandes Usuarios que consumen más de 300 kilovatios (kW) de potencia y la pagan a la distribuidora (denominados GUDIs), que verán aumentos en sus boletas de entre 35% y 50%, de acuerdo a cálculos oficiales.
La intención es lograr un importante ahorro fiscal, que no puede precisar Energía por el momento, pero que calculan que sería cerca de $ 20.000 millones.
Tal como contó anoche El Cronista, se trata de una corrección de un "manifiesto tratamiento desigual en materia de costo de la energía eléctrica que había entre usuarios de más de 300 Kv diarios", según informó oficialmente hoy el Gobierno, y tendrá un impacto significativo.
El Precio Estabilizado de la Energía (PEE) en las horas pico, resto y valle trepará a partir del mes que viene un 89%, al tiempo que el Fondo Nacional de la Energía Eléctrica se duplica, de $ 80 a $ 160, de acuerdo a lo que establece la Resolución 131 y su anexo, firmada el lunes por el secretario del área, Darío Martínez.
Asimismo, el Precio de Referencia de la Potencia (POTREF) se mantiene en $ 80.000 por megavatio-mes.
Con todo, la parte mayorista de las facturas de estos grandes usuarios representa entre el 30% y el 50% del total, dependiendo cada distribuidora y los impuestos provinciales y municipales.
Es por eso que en el Gobierno estiman que el alza rondará el 35% a 50% final. Energía dejó afuera de la resolución a organismos y entes públicos que presten los servicios de salud y educación.
Fuentes industriales consultadas por este diario contaban que, si bien esta medida tiende a un sistema justo y que defienden la idea de que las tarifas deben reflejar los costos, este aumento debería ser escalonado y que podría tener un importante impacto en los precios de los bienes, justo cuando el Gobierno ajusta todas las tuercas para que no se escape la inflación.
"Hasta ayer existían en Argentina menos de 2900 grandes consumidores sobre unos 650.000 pequeños y medianos comercios, talleres, industrias y prestadores de servicios, que tenían un subsidio que significaba un diferencial de costos y un beneficio con respecto a sus competidores en la provisión de los mismos bienes y servicios. Estas industrias beneficiadas iban desde fábricas automotrices hasta grandes espacios comerciales, incluso petroleras", comunicaron en el Gobierno.
Martínez manifestó: "Hemos tomado esta medida para remediar inequidades que provocaban distorsiones en el costo de la electricidad entre empresas de similares tamaños y actividades, algunas de las cuales pagan el precio monómico y no tenían acceso a la tarifa subsidiada, de la que gozaban sus competidoras".