“Seamos claros: los supermercadistas no fijamos ningún precio. Vendemos el 9% de todas las manzanas, el 3% de las peras y sólo el 27% de la carne -dice Vasco Martínez-; ¿anotaste bien? 73% de la carne se vende en carnicerías que no suelen estar -precisamente- 100% en blanco”.
Aunque desde ASU (Asociación de Supermercados Unidos) reconocen que el gobierno nacional está empezando a controlar la cadena de la carne, pide más firmeza y que se haga cumplir la medida que dispone medios de pago electrónicos en todos los establecimientos. “Cuando se paga con tarjeta, la plata ingresa al sistema de contralor”, redunda.
“Los supermercados trabajamos 100% en blanco y está perfecto que nos fiscalicen todo, desde salarios, francos trabajados y aportes, todo, pero pedimos que también se la hagan más difícil a la competencia desleal”.
Menos peor
El contexto del reclamo de ASU es conocido: según los números que ellos validan (de la consultora Escentia), las ventas acumulan una caída del 4,9% en el primer semestre, con una tendencia a la baja en la caída (se cae menos en el interanual). El dato positivo es que junio tuvo un crecimiento del 1% en relación a mayo.
Uds. se quejan de la competencia desleal, pero también son poco competitivos con los mayoristas que les ganan clientes y volumen.
Menos de lo que se dice y se cree -apura Vasco Martínez-; hay hasta una moda de decir que se va al mayorista. Además, mucha gente se queda con la idea del precio del mayorista sin IVA. Es lógico que tengan mejores precios: tienen un tercio del personal por m2 y ese rubro es entre el 18 y el 20% de nuestros costos. Tienen mucha menos bocas: hay 32 Maxiconsumo (que es la cadena mayorista más grande) y 600 Carrefour, por ejemplo, y la logística implica otro 7,2% de los ctos.
Vs. Chile
En Argentina, el canal supermercadista vende el 34% de los alimentos, versus el 70% en Chile. “En Chile un cajero cuesta menos de la mitad que en Argentina”, remata Vasco Martínez.
Los supermercados en pie de guerra contra verdulerías y carnicerías que venden en negro (“atacar al proveedor”)
Juan Vasco Martínez, de ASU, se siente como un Testigo de Jehová pregonando su verdad: aunque muchos ven a los supermercados como “los malos de la película” en los incrementos de precios, nadie se alarma cuando compra frutas, verduras y carne en negro (sin ningún ticket) en pequeños comercios. “Le pedimos al gobierno que controle la cadena de venta hacia arriba, de dónde salen los alimentos que llegan luego al público”, dice.