Martin estudiaba ingeniería agronómica y Paula profesorado de música, además de dedicarse al modelaje. Corrían los días de marzo, mucha incertidumbre, tiempo era lo que sobraba y cada mediodía Martin prendía el fuego, ponía la cacerola en la hornalla, o prendía el horno… ¡Hervir agua para un arroz, jamás! Paula, su novia, sabiendo esto, cumplía el aislamiento a pocas cuadras de Martín, a la distancia le propone hacer un Instagram sobre comida, recetas, y fuego. “Como yo no podía ir a su casa a grabar videos, él empezó la página con recetas, para que la gente lo conozca y pueda seguir”, comenta Paula Helbling.
El Instagram de A cara de fuego comenzó a sumar seguidores los videos de recetas, del paso a paso fue un éxito, (las rapiditas salen riquísimas); “De repente la página explotó, pudimos empezar a generar contenido juntos y a medida que fue creciendo, la gente empezó a preguntar si hacíamos cocina en vivo, para eventos, cumpleaños, casamientos”, dicen Paula y Martín.
La página en su inicio fue para difundir recetas, todo lo relacionado al fuego, aun sin ser cocinero profesional, “la gran repercusión que tuvo la página me animó a empezar el curso de cocinero profesional, conocer aún más técnicas de elaboración, llevar mi pasión a un nivel profesional", comenta Martín.
Hoy, el perfil A cara de fuego tiene 115 mil seguidores. La pandemia cambió el rumbo de la vida de ambos, ahora tienen un emprendimiento con mucho potencial, sin techo. La página tuvo muchísima aceptación en la ciudad, el país y en otros países también, como España, Brasil, México.
Martín comenzó a cocinar, hizo su Instagram junto a Paula con una estética propia, entre el contenido de recetas, el estudio de cocinero profesional, comenzaron los eventos. “Hacíamos un menú acotado, en un fogonero que teníamos en casa. A pesar de que recién iniciamos, nos hablaron para trabajar en conjunto”, dicen.
El armado del menú para eventos nunca resulta fácil, pero lo novedoso fue que todo se hacía a las brasas, y en vivo. Martin pensó el menú de acuerdo a su experiencia y a la ayuda de sus profesores que lo orientaron en puntos claves.
El evento que marcó un antes y después fue el que le hicieron a Paulo Londra. Las redes explotaron. “A ese evento llegamos a través de un amigo de él, nos escribió por Instagram, le gusto la estética de los videos, el fogonero, como nos presentamos en los eventos”, comenta Paula.
La comida en un evento es clave, y el hecho de ser parte es gratificante para Paula y Martín, ya que ofrecen una experiencia, la comida asada no es solo una comida, es un todo, es juntarse, compartir y disfrutar del fuego.