Instalar este negocio fue todo un desafío. La familia no viene del sector gastronómico pero con capacitación y experiencia lograron posicionarse en Despeñaderos como una excelente opción de cocina de autor.
"Nos vinimos de Córdoba a vivir "al monte" y nuestra idea fue generar un espacio en la zona donde encontrarse y disfrutar de un buen café, tés de especialidad con panificación recién horneada y pastelería artesanal", relata Virginia.
La propuesta supera las expectativas de los clientes con sus jugos 100% naturales y la limonada más famosa en la zona. También se ofrece a granel para eventos. Se suma a la carta vino orgánico y cervezas artesanales sin T.A.C.C.
Los fines de semana la cocina de autor tiene opciones veganas y vegetarianas y la incursión de carnes cocidas a cocción lenta en ahumado.
"Promovemos la cultura del "no plástico", la basura que generamos y hasta los aceites son separados para su reciclaje. Hacemos compostaje, nos abastecemos de huertas orgánicas y la mayoría de nuestros proveedores son productores locales. Nuestro jamón cocido natural y todos los fiambres son un manjar", finaliza Virginia.