Tanto personas físicas como jurídicas pueden solicitar un aval para tener líneas de financiamiento a través de una SGR. El acceso a estas líneas de financiamiento (obligaciones negociables simples, pagarés bursátiles y cheques de pagos diferidos) a través de sociedades de garantía recíproca es ágil y flexible. Y, como siempre mencionamos, apalancarse a través del mercado de capitales es un complemento del crédito bancario. No es uno o el otro, sino alternativas que van de la mano.
Lo mejor es combinar diferentes herramientas, plazos y monedas para obtener la estructura más óptima para cada empresa.
Los instrumentos
- Cheques de pago de diferido (CPD): son los instrumentos más utilizados por ser también los más simples. En este segmento, se pueden descontar cheques emitidos por la propia empresa o de terceros avalados por una SGR. También existen otros segmentos de descuentos de cheques: patrocinado, directo garantizado, directo no garantizado y warrant. Para obtener más información, ver acá.
- Pagarés bursátiles: son emitidos por las Pymes y deben estar avalados por una SGR. El plazo puede comenzar en 31 días y ser hasta de 3 años. Es similar al cheque, pero tiene la ventaja de que pueden emitirse tanto en pesos como en dólares. Cuando la emisión es en moneda extranjera, se puede realizar una cobertura con dólar futuro para cubrirse de riesgos de devaluación de dicha moneda.
- Obligaciones negociables (ON) simples: son instrumentos de deuda emitidos por empresas privadas. Las ON simples cuentan con términos y condiciones establecidos al momento de la emisión, son flexibles y a medida de cada caso, y permiten estructurar los pagos de intereses y capital al flujo del negocio. Las ON se instrumentan a través de una SGR y se negocian en el mercado de capitales a través de TSA Bursátil (estos instrumentos son el equivalente a los bonos públicos, pero destinados a la financiación del sector privado).
Las empresas pueden recurrir al mercado de capitales para financiar proyectos de inversión, aumentar el stock de inventario, comprar maquinarias y equipos, renovar el parque tecnológico, adquirir plantas o inmuebles industriales, ampliar el financiamiento de sus ventas, financiar exportaciones/importaciones, reestructurar pasivos, refinanciar pasivos u otras actividades productivas.