Cassaforma es un sistema constructivo de paneles hechos a base de dos mallas de acero vinculadas entre sí por conectores soldados con una placa ondulada de poliestireno expandido que juega una suerte de aislante.
“El sistema permite una importante reducción de costos energéticos, de obra y tiempo”, aseguran desde la compañía.
A estas placas se les aplica, luego de su montaje, una capa de concreto de espesor predeterminado, a través de dispositivos neumáticos de proyección, ya sean manuales o continuos.
Una vez proyectada la capa de concreto, las placas consiguen su propiedad de ser sismorresistentes y de poseer una alta capacidad de carga; monolíticamente vinculadas entre sí, sin interposición de juntas de ninguna clase. Al mismo tiempo, los cerramientos así construidos proporcionan una excelente aislación térmica que sobrepasa con holgura los requerimientos prácticos o normativos.
El sistema reemplaza lo que en la construcción tradicional significa la ejecución de encadenados, estructuras de hormigón armado, sus encofrados y armaduras, mamposterías, dinteles, revoques gruesos, aislaciones horizontales y verticales.
Cassaforma se trata de una de las novedades que llegó a Batimat Expovivienda, este fine semana en La Rural.