Las Mil y Una Noches es la telenovela del momento y eso se reflejó en Feriar ya que los puestos con piezas de ornamentación árabes acaparaban la vista con sus lentejuelas, cristales, vidrios y telas.
En el puesto de Sahara Artesanías dimos con un elemento que destacó por sus proporciones y estética: un narguile de $ 7.000 de casi dos metros de altura. “Todos vienen a ver estos aparatos porque ven que en la novela se fuma mucho. Pasó como en El Clon cuando todas las chicas venían a buscar caderines o trajes para bailar. Son modas”, aclaró María Ledesma, empleada del comercio.
Entre las piezas más impactantes, nos topamos con un mural de Mosaicos Alhamzari que -si bien no está a la venta- está valuado en $ 20.000. “Muchos vienen a hacer mosaiquismo porque prácticamente lo consideran una forma de terapia y de esas ‘sesiones’ nacen productos como estos”, explicaron en el stand de Patricia Bugin.
Jorge Puchetta se dedica a la confección de vestidos para muñecas a crochet y cuenta con piezas que parten de los $ 80 hasta -la más cara- $ 1.500. “Es un vestido de coya con varios tipos de lana, con enagua incluida y hasta bolso para llevar al bebé. Es una confección muy detallada que la gente pide pero que en otros casos los coleccionistas buscan mucho por la artesanía”, cuenta Puchetta.
María Fernanda Barr llevó los fascinators a la Feria y consigo vendió por $ 3.000 aproximadamente uno de los sombreros más caros que tiene en stock. “La gente se anima a los sombreros y sobre todo a los facinator que son fácil de portar y vestir”, contó la diseñadora.
Finalmente, Buena Cepa llevó su innovador “Despolvillador de Yerba Mate” un producto funcional fruto de la innovación de un grupo de jóvenes cordobeses.
¿En qué consiste? Es un dispositivo que parece un vaso pero que sirve para “decantar” el polvo de la yerba. Uno carga el recipiente con la yerba, lo agita y separa los tronquitos buenos del polvillo.