Contacto exclusivo: probamos el Alfa Romeo MiTo
(Por José Manuel Ortega) Ultima nota de esta serie de archivo y final del ciclo 2009 de InfoAutos. Experiencia encantadora a bordo del pequeño Alfa. ¡Felices Fiestas y hasta pronto!.
Una gran dosis de adrenalina recorrió mi cuerpo cuando Juan Manuel Castelli, titular de Autoquattro, me entregó la máquina italiana con un sincero: “Cuidalo”.
Pedido lógico teniendo en cuenta que hasta que lleguen a nuestra ciudad las tres unidades que pudo gestionar Autoquattro –ya vendidas- es el único MiTo disponible.
Para darle mayor expectativa, un color rojo Ferrari que le queda “de maravillas” como dicen los españoles. Desde que salí del concesionario me sentí intimidado. Todo el mundo –todo- se da vuelta para contemplarlo corroborando que se trata de un verdadero mito. Su diseño es simple, nada de excentricidades. Bien italiano, con esa mezcla de elegancia propia de las ciudades que dieron origen a su nombre: Milano y Torino. Es de aquellos autos en los que uno busca qué podría modificar en su estética… y no encuentra nada.
Su interior es muy deportivo, bien racing. Butaca muy baja, que sumada a su cintura alta y poco vidrio dan una sensación de estar manejando un auto de carrera.
Criticable que el climatizador sea muy similar al usado en el Fiat Línea, aunque esto –de compartir elementos- es común en muchas marcas.
Butaca de regulación manual, con buena sujeción y volante con doble regulación aseguran una buena posición de manejo.
Excelente equipo de audio y una parafernalia tecnológica conformada por ABS con EBD, ASR, MSR, CBC, Hill Holder, VDC, DST…¿te mareaste?. Cada sigla es un sistema que contribuye a la seguridad y placer de conducción.
Además, tres programas setean el auto en diferentes parámetros: Normal, Sport y All weather.
En Sport resulta increíble como tira desde abajo y los 8 segundos que necesita para alcanzar los 100 km/h muestran su poderío. Tirar cambios es un placer indescriptible del que no abusamos por las recomendaciones recibidas.
Algo notable también es su elasticidad. Puede circular en 4ª a 30 km/h sin tironeos, y si se lo pisa –sin rebajar- empuja sin problemas.
También probamos circulando a 120 km/h en 6ª –a bajas rpm- acelerar y responde al instante.
La tenida es notable. Intentamos que sacara la cola en curvas lentas –aun en modo Sport, que brinda mayor libertad para el manejo deportivo- pero los controles electrónicos no permiten excesos.
Algo durito, lo cual es razonable en un auto de 155 CV, cubiertas 215/45/17 y “cuore sportivo”, pero mucho menos que otros disponibles en el mercado. Razonable confort de marcha en ciudad.
Resumiendo, un muy atractivo modelo, que garantiza emociones al volante, responde –sin miedo- al pie derecho pesado, pero que también puede usarse para ir a hacer las compras al súper, aunque sería un desperdicio, ¿no?.