Salón del Automóvil de Frankfurt: ¿Qué hay de nuevo, viejo? (Parte II)
(Por José Manuel Ortega) Última parte de las novedades del salón germano. En este caso se nos subió el lujo a la cabeza y vamos por los más exclusivos.
Toyota está mostrando su Land Cruiser 2010 (foto 2), un modelo muy popular en Japón y Europa, y que cuenta con una gran tradición, cumpliendo 55 años. Motores nafta V6 4.0 de 250 CV (¿y el downsizing?) y diesel TD 3.0 de 173 CV, similar al que equipa a Hilux y SW4 producidas en Zárate.
Lamborghini, propiedad de VW, está mostrando su Reventón Roadster (foto 3), nombre de fonética un tanto peculiar para nuestro castellano, con un motor de 6.2 litros y 670 CV, suficientes para alcanzar los 340 km/h y consumir 3.4 seg. para llegar a 100 km/h. Su peso es de 2000 kg. Comparando con el Mercedes-Benz C63 AMG, con 457 CV y 2200 kg, puede comprenderse lo complicado que es bajar un segundo en el 0 a 100. En las pruebas de aceleración el factor principal es el peso (en cambio en velocidad máxima tiene mucha influencia el coeficiente aerodinámico). El Reventón, con 200 kg menos, 220 CV más y una puesta a punto más racing, “solo” baja 1 segundo la marca del C63 AMG en esta prueba.
Seguimos con el grupo Volkswagen y el Audi R8 e-Tron (foto 4), un concept derivado del R8, con muy pocas precisiones confirmadas. Se presume que será 100 % eléctrico, o al menos híbrido.
Volvo está mostrando su C30 rediseñado (foto 5). La marca sueca cuenta con escasa presencia en el país, a pesar de contar con sus fieles seguidores. Del C30 que llegó a Argentina, se ha trabajado sobre frente y òpticas, asemejándolas a las del XC60, con un toque más deportivo y personal. Contará con un motor de entrada de gama 1.6 diesel de 109 CV y sistema Start&Stop.
Jaguar (junto a Aston Martin y Land Rover, propiedad de Ford hasta no hace mucho) muestra su buque insignia, el XJ versión 2009 (foto 6). El modelo original se presentó en 1968, y salvo la última década se ha mantenido desde entonces con muy pocas modificaciones, como todo clásico inglés.
Hasta acá un repaso de lo que se vio en Frankfurt.