Presente desde lo 90 en el país y en prácticamente todo Latam, Corning es “la sombra” tanto de las operadoras (proveen a más de 1.200), como de las empresas y cooperativas de Argentina, aportando y ofreciendo mantenimiento de algo tan vital y clave en el mundo hiperconectado de hoy: la fibra óptica. La evolución de la conexión que ofrece altísimas tasas de transferencia, marcando así una era tanto para empresas como para hogares.
Un fenómeno que, pese al amargo contexto de la pandemia, ha tenido un crecimiento exponencial, disparando servicios como la telemedicina, el 5G y ofreciendo velocidades de conexión abismalmente más rápidas y estables que otros tipos de transmisión de datos.
El impacto en las zonas más remotas
“Es dramático el cambio”, de esta forma contundente lo define Hernán Ante, gerente de ventas para Sudamérica, asegurando que la fibra óptica permite una conectividad de calidad premium. “Vos podés tener miles de puestos de trabajo en distintas partes del mundo. La gente no tiene que emigrar para conseguir los mismos beneficios laborales”, añade.
De este modo, este tipo de infraestructura solidifica más la idea del teletrabajo, permitiendo estar en cualquier lugar del mundo, pero manteniendo la misma calidad de conexión y performance que en cualquier gran centro urbano. También es un beneficio mutuo entre el proveedor y el usuario, ya que el costo de inversión es 10% menor que cualquier otro tipo de conexión.
Inversiones, la clave para el futuro
Respecto al despliegue a futuro de la fibra óptica Hernán asegura que, si bien el programa Arsat ha ayudado a distribuir la fibra hasta los lugares más remotos del país, las inversiones son la el puente para un crecimiento pleno de este tipo de conexión, no solo para la proveeduría de internet, sino para la futura licitación del espectro para el 5G en el país, que aún se hace desear ante la falta de inversiones producto de la situación macroeconómica el país.