A Giacomino sólo le queda un camino hacia adelante
Por primera vez en muchos años, Rubén Daniele y el sindicato municipal están algo acorralados. Nadie les “tiró” la opinión pública en contra (como dice el secretario general del Souem) sino que ellos mismos fueron colmando el vaso hasta llegar a este punto.
“Sin saber el oficio y sin vocación” (como dice Serrat), Giacomino tuvo que hacer más tarde que temprano lo que ninguno de sus antecesores quiso, supo o pudo. Si cumple con lo que proclamó en su carta a los vecinos (“Querida Córdoba, es ahora o nunca”), le estará haciendo un gran favor a la ciudad. Quizás se inmole políticamente en el camino. O quizás el ordenamiento de la burocracia municipal lo catapulte a otro plano entre los devaluados dirigentes políticos. El tiempo dirá.
Pero ese es el camino. (IB).