¿Sabías que... en Argentina el consumo de soda -agua con gas- es de 80 litros/año per cápita, mientras en Europa es de 20?
¿Y sabías que... sólo dos países del mundo tienen la figura del sodero: Argentina y República Checa, precisamente un país donde Soda Stream tiene un excelente desempeño?
Con esos datos bajo el brazo y un marketing que no pasará desapercibido llega Soda Stream a Argentina, una operación directa (y no una representación) de la empresa que -al estilo Nespresso- propone que cada familia elabore su propia soda. La máquina Fizzy (su modelo popular) tiene un costo de $ 2.200 y se puede adquirir desde hoy en Jumbo Retail (la cadena dueña de Disco) y Frávega. La fuente de gas alcanza para gasificar 60 litros de agua y tiene un costo de reposición de $ 299.
"Somos la marca de soda más grande del mundo: más grande que Perrier y Sanpellegrino", dispara el Javier Calandrelli, Country General Manager de Soda Stream en Argentina, una operación directa que importará sus equipos desde Israel, aunque tiene 9 fábricas en el mundo.
El stock inicial con el que llegan al mercado es de 20.000 unidades, pero esto sólo es el inicio: tienen mucha expectativa en el mercado argentino por el alto consumo de soda ya existente.
Además del modelo Fizzi, la marca llega también con un equipo de mayor performance: Crystal, a un costo de $ 3.999.
Según datos de la empresa, en Alemania Soda Stream fue el producto más vendido del último año en Amazon y la empresa es líder de la categoría en los países nórdicos.
A algunos señores mayores presentes en el evento de ayer en Buenos Aires, Soda Stream les rememoró el modelo de negocios de los viejos sifones Drago, ahora aggiornado en diseño y canal de distribución.