1. Se agudiza la pérdida del poder adquisitivo de los honorarios profesionales
En los últimos 10 años se registró una caída en la comparativa con la Canasta Básica Total (CBT) y con la Remuneración imponible promedio de los trabajadores estables (RIPTE).
En 2011, según datos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) el ingreso promedio de una persona con estudios superiores completos (profesional) era equivalente a 8,8 Canasta Básica Total -para una persona adulta-.
En 2021, según EPH equivale esa comparativa cayó a 2,9. Y, según el último estudio del Observatorio de Fepuc, el promedio de ingreso de los profesionales encuestados en Córdoba equivale a 3,9 Canasta Básica Total.
“Es decir que, en el mejor de los casos, el ingreso del sector se depreció en un 56% en el último decenio”, advierten.
2. Negociaciones vulnerables
“Los profesionales independientes no cuentan con ningún marco regulatorio que les permita llevar adelante una negociación colectiva, por lo tanto, quedan en desventaja frente a la “posición dominante del empleador o cliente”, acusan.
3. Vínculos laborales “flojitos de papeles”
En números: 63% de profesionales cordobeses trabajan actualmente facturando por todos sus servicios. Es decir que todo lo relacionado con su seguridad social, su cobertura médica y su futuro jubilatorio, ingresa en la estructura de costos requeridos para el ejercicio de su profesión y al futuro que le dará una jubilación de monotributista, o lo que logran algunas profesiones que cuentan con cajas previsionales.
El Observatorio verifica que en los últimos cinco años, la modalidad de contratar a profesionales “en relación de dependencia” fue migrando a la modalidad de “locación de servicio”.
4. Pluriempleo, una realidad creciente
En Córdoba, más del 30% de los profesionales recurren al pluriempleo para lograr los ingresos que necesitan. En esta línea, buscan combinar modalidades de contratación, para tener al menos uno de los ingresos bajo relación de dependencia (entre el 12% y 14% logra esta alternativa) y así garantizar algunos beneficios encuadrados en los convenios colectivos.
En Córdoba, 85% de profesionales se vinculan laboralmente al ámbito privado. Y, de ellos, 6 de cada 10 trabaja en empresas u organizaciones con menos de 10 personas en su staff.
El 84% de los que trabajan en empresas más pequeñas son contratados de manera independiente, facturando por todos sus servicios. Solo un 3% tiene relación de dependencia.
En cambio, quienes logran trabajar en empresas más grandes, logran en mayor proporción contratos en relación de dependencia.
Algo similar sucede en el sector público. Allí, los hombres y mujeres profesionales que trabajan en municipios tienen contrataciones más precarias, solo 3 de cada 10 tienen relación de dependencia. Mientras que entre los que trabajan para el gobierno nacional más de 7 sobre 10 logran un vínculo con relación de dependencia, y en el provincial la proporción es 6 de cada 10.