Plan Quinquenal: aunque ya nadie recuerde aquella metodología de planificación peronista, la propuesta del gobierno no es de “shock” sino gradualista en 5 años.
Suma cero (veremos): a razón de un costo fiscal del 0,3 puntos del PBI por año, en 5 años el gobierno perdería recursos por 1,5 puntos. Pero como creen que habrá -por esta reforma- mayor crecimiento y nuevos contribuyentes, el resultado final será entre neutro y de 0,3 puntos del PBI en total.
Hacia Ganancias del 25%: la actual alícuota del 35% en las Ganancias de las empresas caerá al 25% cuando haya reinversión de utilidades desde la aprobación de la ley. Pero el programa general lleva la alícuota (con o sin reinversión) al 30% en 2019 y al 25% en 2021.
Audacia en contribuciones patronales: se propone general un mínimo no imponible de contribuciones a partir de los $ 12.000 de salario, lo que facilitaría el blanqueo de empleados de comercio y gastronomía, por ejemplo.
Renta financiera gravada desde los $ 52.000/año: para compensar las bajas, se establece un impuesto del 15% a la renta de activos financieros en dólares (como ON o Bonos) que baja al 5% en caso de inversiones en pesos, a partir de una renta anual de $ 52.000.
Venta de inmuebles, sin impuesto: a partir de la aprobación de la Ley, la primera venta de un inmueble no tendría gravamen alguno y sólo habría un 15% sobre la diferencia de precio (ganancia) en la segunda venta (comparando precios de las escrituras actualizados por inflación).
Interesante I: la baja del 17% a 0% de los impuestos internos a productos electrónicos.
Interesante II: la baja de 10% a 0% de los impuestos internos a autos y motos de gama baja y media y un aumento del 10 a 20% en vehículos de alta gama, helicópteros, aviones y otros medios de movilidad suntuarios.
Garrote a la birra: habrá más impuestos internos a las bebidas alcohólicas como la cerveza y el vino. Los cigarrillos bajan alícuota pero suman un cargo fijo. Los combustibles también tendrán un componente impositivo fijo y no atado al precio.
Cheque a cuenta de Ganancias: como ya lo tienen las pymes (por Ley), el impuesto a los C?editos y Débitos bancarios se irá transformando en este período en un adelanto de Ganancias.
A esta batería de medidas se le sumarán otras no detalladas para bajar la evasión y aumentar la base de contribuyentes. Si las simulaciones de Dujovne se verifican y el proyecto pasa sin mayores cambios por el Parlamento, el costo fiscal en 5 años será de 1,5 puntos del PBI, que se suman a los 2 puntos que ya perdió el Estado por las disminuciones en retenciones al agro, minería y Ganancias personales el año pasado.
Ingresos Brutos: siguen las charlas
Aunque una parte importante de la reforma impositiva debería venir desde las provincias, Dujovne fue cuidadoso a la hora de dar precisiones, porque todavía siguen las discusiones.
Sí saludó la iniciativa de CABA, Buenos Aires y Córdoba de eliminar II.BB. a los bienes de extraña jurisdicción, también conocidos como “aduanas internas”. (IB)