Sin cobrar prácticamente nada, más que alguna comisión por operaciones en el extranjero, hoy los bancos digitales se imponen con fuerza en el mercado financiero. Wilobank es del empresario Eurnekian, dueño de, entre otras empresas, Aeropuertos Argentina 2000. Rebanking es de Transatlántica y Brubank es propiedad de Juan Bruchou, ex CEO de Citi. Todos ellos tienen el visto bueno del BCRA para operar.
Estas empresas novedosas compiten hoy con gigantes nacionales e internacionales y ofrecen un paquete de beneficios que incluye intereses sobre saldos en caja de ahorros, que llegan al 45% anual, transferencias y extracciones sin costo. En contraste con el continuo aumento de comisiones de los bancos tradicionales (cuentas, renovaciones y retiros de efectivo), la conveniencia de lo digital sobre lo viejo es evidente.
Como se ve en la tabla, los bancos digitales no cobran por la gran mayoría de sus productos y gestiones, y hasta dan la posibilidad de acceder a los beneficios premium de Visa, MasterCard y Amex, que incluyen entre muchos otros, asesoramiento en viajes y entradas al cine sin cargo. Las operaciones se realizan a través de home banking o apps que se descargan al celular, con seguridad y durante las 24 horas, todos los días.
Los grandes bancos registran subas de alrededor del 50% anual en comisiones, y para evitar su extinción algunos ya trabajan en la creación de entidades digitales que puedan competir con las opciones de banca online que se ofrecen cada vez con mayor éxito en el mundo.