Todavía hay olor a pintura fresca y obreros trabajando en el flamante Movistar Arena de Villa Crespo, pese a que ya pasaron por allí shows de Tini, Serrat & Sabina y Chayenne. Y viene más todavía.
El flamante estadio con aforo máximo para 15.000 personas (con la pista libre, sin butacas), está asentado en un lugar muy accesible de CABA, con una estación de tren que -en unas semanas- tendrá parada justo en el mismo Arena, subterráneo a dos cuadras y 21 líneas de colectivos.
A las 4.000 personas que entran en el campo sentados se le suman otras 4.200 en el primer nivel y 3.000 en el segundo, coronando todo con 17 palcos a cada lado en el tercer nivel (34 en total) y un vip frente al escenario con capacidad para unas 120 personas.
Marcas como Banco Hipotecario, FirstData, McDonald's, La Nación y la misma Movistar ya tienen "suites" (como les llaman a los palcos) reservadas. Son un espacio muy práctico con dos hileras de 5 butacas y cuatro banquetas sobre una barra, con heladeras, televisores y casi "baño privado", pasillo de por medio.
Al centro del tercer piso, cerrando los palcos y justo frente al escenario está el vip Membership Rewards patrocinado por American Express, entre otras marcas, donde entran 120 personas entre butacas y cómodos sillones, todo abastecido por catering y marcas de primera línea como Chandon y Campari.
La apuesta del consorcio ASM Global que gerencia el emprendimiento es tener entre 80 y 100 aperturas al año, un número que en "épocas normales" (si tal cosa existiera en Argentina) sería razonable, pero que en el actual contexto suena a un objetivo "desafiante".
El modelo de negocios de ASM Global en el Movistar Arena es alquilar el predio (incluyen sumas fijas y boderó o porcentaje de ventas), pero no producen ni coproducen shows (es decir, no asumen riesgos).
Los productores tienen servicios "cautivos" como el sonido (L-Acoustics, primerísima marca a nivel mundial), las luces y la gastronomía que son operados por la organización. En cambio, pueden optar por 7 configuraciones de armado que van desde las 4.500 plazas a las 15.000, amplio backstage para descarga de equipos, impecables y amplios camerinos y un escenario muy flexible y modular para distintas puestas.
¿Deportes? Sí, también. Aunque no pudieron tomar el partido Federer - Del Potro, ya tienen consultas por producciones de boxeo y el piso central "se banca" perfectamente armados para básquet y vóley, por ejemplo.
Aunque lleva el nombre de Movistar, la empresa del grupo Telefónica no participó de la construcción ni del gerenciamiento del predio y "solo" aporta el "naming" en un acuerdo por cuatro años donde -entre otras facilidades- dispone de 2 de los 34 palcos.